Las previsiones no pueden ser mejores. Son muchas las voces que se suman a esa corriente ya generalizada de que este verano será fructífero para el turismo de interior. Una de esas voces es la de Javier Arquero, responsable de turismo rural en HC Hostelería. Aunque todavía no tiene estimaciones de ocupación, considera que «sin ser los meses del año más importantes para nosotros, sí esperamos que sean mejores que otros años por los condicionantes de que los turistas prefieren desplazamientos más cortos, de fin de semana largo y sin tanta aglomeración».

Para confirmar este horizonte tan positivo resulta «fundamental» restablecer la movilidad con Madrid y Valencia, fundamentalmente, lugar de origen de la gran mayoría de aquellos que visitan Cuenca. «Esperemos que cuando eso suceda», comenta el directivo de esta agrupación integrada en CEOE-Cepyme, «la gente que viaje nos elija como uno de sus destinos preferidos». Aquí, añade, «van a encontrar mayor seguridad en referencia al Covid-19, con ambientes más despejados y una dispersión social mayor que en las concentraciones que tendrán en las zonas de playa».

Los empresarios del sector no han permanecido impasibles durante el confinamiento y han hecho los deberes. «Tiempo hemos tenido para adaptarnos a las circunstancias», comenta Arquero, que entiende que es momento de pasar a la siguiente base: «Ahora es cuando toca recibir a la gente y creo que lo vamos a hacer sin ningún problema». «Los protocolos están muy claros y solo toca seguirlos al pie de la letra», sentencia al respecto.