La afición responde a la llamada y arropa al Conquense

Manu Reina
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[GALERÍA DE FOTOS] Más de 3.000 gargantas llenan de colorido y cánticos La Fuensanta para vivir una de las páginas más bonitas de la historia del club

La afición responde a la llamada y arropa al Conquense - Foto: Javier Guijarro Fotografia

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¡Campeones!

El llamamiento del Conquense por activa y por pasiva, por redes sociales, por el boca a boca de la gente y por todos los métodos que pueda haber, ha tenido su respuesta. Más de 3.000 gargantas acudieron a La Fuensanta para llevar en volandas al equipo en el partido más decisivo de la temporada y que ha culminado con el merecido y soñado ascenso a Segunda RFEF. El Conquense consiguió batir al CD Tarancón por tres tantos a cero, gracias al doblete de Jairo Cárcaba y al gol de Antonio Fernández. 

No eran ni las seis de la tarde y las gradas empezaban a tomar color. El blanquinegro se hacia notar pese a que faltaban 60 minutos para que el colegiado iniciase el partido, pero la gente tenía ganas de partido y de vivir una tarde histórica para el club y también para la ciudad.

La charanga, a ritmo de canciones y temas, empezaba a calentar el ambiente. El sonido se colaba entre la gente y también entre las canciones retransmitidas por megafonía del estadio. El tiempo pasaba y los aficionados y seguidores no dejaban de llegar. Y es que era una cita en la que no se podía fallar.

La emoción se notaba en el ambiente. Mucho más, cuando los titulares y suplentes de ambos equipos salían del túnel de vestuarios y desfilaban hacia el medio campo. Era imposible no fijarse en el mosaico que preparó la grada joven con una gran lona. Era la guinda perfecta para que el equipo ya fuera ganando por uno a cero antes de comenzar.

Pequeños, adolescentes, hombres y mujeres, así como adultos, dieron un gran color a La Fuensanta para arropar a los suyos y llevarles en volandas. Los jugadores lo notaron y respondieron con un auténtico recital de principio a fin. Había que ganar y el resultado de tres a cero lo dice todo. Tras el pitido final, el estallido de júbilo era una realidad. Y es que el Conquense es ya equipo de Segunda RFEF.