Los movimientos demográficos no suelen dar buenas noticias a la provincia de Cuenca, que en las últimas décadas viene sufriendo una constante sangría en su población, salvo contadas excepciones como en los dos últimos años que ha llegado a experimentar ligeros incrementos.
Sin embargo, en este recién finalizado 2023 sí se puede hablar de una excepcional noticia demográfica, puesto que Cuenca ha despedido el ejercicio con 1.995 fallecimientos, la cifra más baja de los últimos 24 años, es decir, en lo que llevamos de siglo, según las estimaciones del Instituto Nacional de Estadística (INE) con datos de la Dirección General de Seguridad Jurídica y Fe Pública.
Y es que Cuenca ha llegado al 31 de diciembre de 2023 con 572 decesos menos que en 2022, cuando se alcanzaron los 2.567, lo que supone una disminución del 22,3 por ciento.
Las muertes en los últimos 24 años oscilan entre los 3.209 de 2020 y los 1.995 de 2023. - Foto: Elaboración propiaDiferencia que se incrementa más aún, como es de esperar, si se compara con el año de la pandemia del Covid-19, 2020, cuando las muertes superaron las 3.200 y, por lo tanto, se situaron muy por encima de las 1.995 de 2023, en nada más y nada menos que en 1.214, un 37,8% más.
Nada que ver con las cifras de prepandemia, como por ejemplo 2019, cuando los fallecimientos en la provincia se elevaron a 2.438; aun así un 18,2% por encima de las contabilizadas en este último ejercicio.
No en vano, si echamos la vista atrás y analizamos los números de este siglo XXI, se puede constatar que la mayor cantidad de decesos, como es de esperar, se produjo en 2020 con 3.209, seguido de los 2.567 de 2022, los 2.539 de 2015, los 2.493 de 2017, los 2.455 de 2012, los 2.438 de 2019, los 2.432 de 2021, los 2.427 de 2018, los 2.395 de 2016 y los 2.388 de 2013.
Top 10 de fallecimientos que se enmarca en la segunda mitad de lo que llevamos de siglo, puesto que en la primera la media anual osciló entre los 2.222 de 2009 y los 2.364 de 2008.
El INE estima que en 2023 no se registraron fallecimientos de jóvenes con edades comprendidas entre los 10 y los 14 años. - Foto: Reyes MartínezAl detalle. Así las cosas, los datos del INE indican, además, que en 2023, a diferencia de sus predecesores, murieron más mujeres que hombres; en concreto, de los 1.995 finados, 1.017 fueron mujeres, el 50,6 por ciento, mientras que los hombres no llegaron ni al millar (977).
Cifras que nada tienen que ver con, por ejemplo, los años 2020 y 2000, cuando el 52% de los fallecidos fueron hombres.
El ritmo de muertes en 2023 ha experimentado, por lo tanto, un frenazo en seco con respecto a la tendencia de los últimos 24 años.
No en vano, el INE estima que se produjeron una media de cinco fallecimientos al día, 38 a la semana y 166 al mes. Números que distan bastante de los arrojados por 2022 con un promedio diario de siete decesos, una media semanal de 49 y una mensual de 213.
Diferencias que, como es de esperar, se acrecientan, y mucho, si hablamos del año de la pandemia, cuando se contabilizaron nueve muertes al día de media, 62 a la semana y 267 al mes; eso sí, en el centro de la crisis sanitaria, en tan solo cuatro semanas, del 23 de marzo al 19 de abril, fallecieron 736 conquenses.
Evolución anual. La presencia de las enfermedades respiratorias, vinculadas al invierno, y los fenómenos meteorológicos extremos, tanto por exceso de frío como de calor, se colocan como dos de las principales causas de los picos de fallecimientos a lo largo de 2023.
No en vano, el mayor número de muertes se registró en la última semana, del 25 al 31 de diciembre, con 53, y le siguieron en este particular podio los 52 de la semana del 20 al 26 de febrero, y los 50 de las semanas del 23 al 29 de enero y del 27 de febrero al 5 de marzo.
Por edades, como es de natural, la mayor cantidad de decesos se dio entre los conquenses con más de 90 años, con 664 muertes, seguidos de la franja de edad de 85 a 89 años, con 495, y la de 80 a 84, con 258.
De hecho, el 71% de los fallecimientos, 1.417, correspondieron a personas con edades por encima de los 80.