El anteproyecto de Ley de las Enseñanzas Artísticas Superiores que plantea elevar a nivel universitario los grados superiores artísticos ha caído como un jarro de agua fría en las facultades de Bellas Artes, entre ellas las de Cuenca. Tanto el decano, Francisco Javier Díez de Baldeón, como los alumnos del campus conquense han expresado su rechazo total a un anteproyecto que equipara las enseñanzas artísticas a las universitarias. «Lo que pedimos es que esos título cumplan los requisitos que tenemos que cumplir nosotros, que son muchos en un sentido de calidad de los títulos, formación del profesorado, ingresos, investigación, etc.», explica Díez de Baldeón.
En cuanto a los estudiantes, el decano advierte del perjuicio que se causa a los universitarios por la diferencia de los criterios de acceso, «al no precisar de la EBAU en estos estudios no universitarios».
Por todo ello, explica que los decanos de Bellas Artes exigen al Ministerio de Educación que retire este anteproyecto de Ley de Enseñanzas Artísticas Superiores y tienden la mano al departamento que dirige la ministra Pilar Alegría para lograr un consenso. Eso sí, los decanos advierten que «no van tolerar que se traspasen unas líneas rojas que suponen un duro ataque al sistema de calidad universitaria», tal y como pusieron de manifiesto la semana pasada través de una carta firmada por la Conferencia de Facultades de Bellas Artes.
«Ya están reguladas». El decano asegura que «es evidente que no son títulos iguales y ahora lo que se plantea es crear un sistema paralelo». No obstante, aclara que los decanos de Bellas Artes no se oponen a la integración en la Universidad de enseñanzas artísticas como música, teatro o danza porque «ya están reguladas, están en la universidad, las estamos impartiendo nosotros». No obstante, el conflicto no ha hecho más que empezar y se antoja que a día de hoy el acuerdo esta lejano. «Esto es un ataque frontal al sistema de calidad universitario porque supone un demérito de nuestros títulos, se van a regalar decenas de miles de títulos», explica Díez de Baldeón quien también admite que «estamos sorprendidos y hasta impresionados porque es algo que lleva años larvándose».
El anteproyecto se aprobó en la reunión del Consejo de Ministros del pasado 21 de febrero y desde entonces el rechazo de la comunidad universitaria comenzó a crecer. Los estudiantes de las facultades españolas comenzaron a movilizarse.Ayer mismo, se concentraron a las puertas de la Facultad de BellasArtes del campus conquense.
Mientras tanto, y con el conflicto ya abierto, el presidente de la Conferencia de Decanos de Facultades de Bellas Artes, Alfonso Ruiz, mantiene contactos y reuniones a muchas bandas, entre ellas con la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE) o el Consejo de Universidades para tratar de frenar el anteproyecto. Ante esta situación el decano de la Facultad advierte de que «un problema que vemos es que el Ministerio de Educación es políticamente más importante que el de Universidades y nos preocupa que nos pasen por encima».
El pasado lunes, una delegación de los rectores se reunió con el ministro de Universidades, Joan Subirats, para reclamar que se paralice el anteproyecto de ley. La Conferencia de decanos de Bellas Artes ya ha presentado alegaciones y está previsto presentar más. No obstante, Díez de Baldeón confía en que se logre el mayor consenso posible. «Pedimos que se paralice el anteproyecto, que se busque un consenso y que se trate de una manera más meditada porque se nos ha apartado de la negociación», concluye.
La protesta también se trasladó al interior de la facultad - Foto: Delegación de Estudiantes de Bellas ArtesLos estudiantes lanzan un 'SOS Bellas Artes'. Los alumnos de la Facultad de Bellas Artes se concentraron ayer a las puertas del edificio del campus de Cuenca para expresar su rotundo rechazo al anteproyecto de ley por la que se regulan las enseñanzas artísticas superiores y se establece la organización y equivalencias de las enseñanzas artísticas profesionales. Durante la concentración, que se celebró bajo el lema de SOS Bellas Artes, se leyó un manifiesto. La protesta se extendió a Sevilla, Teruel y los campus de Aranjuez y Fuenlabrada de la Universidad Rey Juan Carlos I. Así lo explicó Olivia Oña, delegada de estudiantes en Bellas Artes, que incidió en que seguirán las protestas para dar visibilidad porque «queremos que la ciudad conozca el problema.