La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) conmemora el Día de la Atención Primaria -que se celebra mañana, 12 de abril- para exigir al Ministerio de Sanidad que impulse un pacto nacional que incluya, entre otros puntos, un incremento de la financiación y de las plantillas para proteger este pilar fundamental del derecho a la salud, que ha sufrido especialmente las consecuencias de la pandemia.
Según datos oficiales, en el cuarto día de adjudicación de plazas MIR, apenas 61 personas habían elegido la especialidad de Medicina Familiar y Comunitaria, pese a que es la de mayor volumen con un total de 2.431 plazas disponibles. Para CSIF es significativo que haya pocas personas los primeros días de adjudicación y lo relacionamos con la falta de incentivos en esta especialidad en relación con las condiciones laborales.
El sindicato presidido por Miguel Borra recuerda que los profesionales de la Sanidad, especialmente los de Atención Primaria, se comportaron como héroes durante la pandemia, incluso dando su vida. El Covid-19 evidenció las graves carencias del Sistema Nacional de Salud (SNS), especialmente en el primer nivel asistencial. Cuatro años después se siguen notando los efectos con las consultas de Atención Primaria tensionadas, lo que obliga a los pacientes a acudir a las urgencias hospitalarias, provocando en muchos casos su saturación.
CSIF recuerda que, en 2019, antes de la pandemia, el 42 por ciento de los pacientes de AP era atendido el mismo día en que solicitaba cita o al día siguiente, mientras que en febrero de 2023 dicho porcentaje cayó al 28,8 por ciento, según datos del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). Es decir, el 72 por ciento de los pacientes que piden cita a su médico de familia tiene que esperar casi 10 días para ser atendido, lo que evidencia la grave falta de especialistas en Atención Primaria.
Todas las comunidades autónomas presentan una situación similar, con Castilla-La Mancha elevando incluso la cita médica hasta las dos semanas dependiendo de la saturación de los centros. No en vano, la falta de profesionales en esta primera línea asistencial provoca el colapso de todo el sistema, desbordando las Urgencias en épocas de mayor afluencia de pacientes. Asimismo, la mayor parte de las agresiones se producen en la Atención Primaria: 442 episodios violentos a lo largo de 2023 dentro de los 646 que se registraron en todo el Sescam.
Por todo ello, pedimos a Sanidad que impulse un pacto nacional que incluya:
-Incremento de la inversión en AP hasta el 25 por ciento del gasto sanitario total.
-Aumento de las plazas de Formación Sanitaria Especializada (FSE), sobre todo en Medicina de Familia y Enfermería, entre otras especializaciones.
-Mejora de las condiciones laborales y retributivas del personal de la sanidad
-Recuperación de la carrera profesional en el Sescam y redefinición de categorías y funciones.
-Retomar la negociación para un acuerdo sobre el Estatuto Marco y homologación retributiva entre las comunidades autónomas.
-Inestabilidad laboral, plantillas envejecidas y exceso de guardias
Por otra parte, una encuesta realizada por CSIF a 2.030 médicos de Familia del Sistema Nacional de Salud (SNS) muestra la inestabilidad laboral, el envejecimiento de plantilla y el exceso de guardias con el que estos especialistas del Sistema Nacional de Salud tienen que realizar su trabajo.
En concreto, tan solo el 47 por ciento de los médicos de Familia tiene su plaza en propiedad. Este dato pone de manifiesto la alta inestabilidad que padece esta especialidad médica. Otro dato significativo es que el 80 por ciento reconoce que hace guardias habitualmente, cuando el 40 por ciento de los médicos tiene más de 55 años, por lo que podría quedar exentos, además de evidenciar el envejecimiento de la plantilla. Por último, los médicos de Familia tienen además una pésima percepción del trato recibido por parte del Ministerio de Sanidad, ya que 9 de cada 10 consideran que les cuidan 'Poco' o 'Nada'.