El Colegio Oficial de Veterinarios de Cuenca ha dejado desierta la edición número 21 de su Trofeo al Mejor Toro de la pasada feria taurina de San Julián. El jurado designado al efecto manifestó en su fallo que ninguno de los animales que se lidiaron en el serial fue completo en todos los tercios ni en su presentación, aunque sí hizo una mención especial al juego en su conjunto que ofreció la corrida de La Palmosilla.
El presidente del Colegio, Luis Colmenar, destacó que el equipo veterinario de la plaza reconoció un total de 37 toros, de los que 25 fueron útiles y 12 no útiles. De esta forma, puso el acento en que durante el ciclo se lidiaron seis astados con la 'etiqueta' de no útiles, dándose la circunstancia de que algunos toros útiles se quedaron sin lidiar.
Asimismo, Colmenar, en un repaso de la profesión veterinaria en relación al ámbito taurino, comentó que «cada año hay un plus de dificultad en nuestra labor y no por ello dejamos de hacerla, y por eso consideramos que cada vez es más importante lo que hacemos». «Somos el filtro más válido para los animales y los consumidores de los espectáculos», añadió antes de rematar: «Lo que está ocurriendo últimamente es muy grave y se echa de menos el respaldo que teníamos antaño por parte de la Administración».
El jurado de este premio taurino, uno de los más importantes y prestigiosos de cuantos se entregan a nivel nacional, está integrado por, además de veterinarios, un representante de los profesionales taurinos, Javier Antón; otro de los ganaderos, Pedro Miota; otro de la prensa, Leo Cortijo; y uno más de los aficionados, Nicolás Hernáiz.