El realizador Juanra Fernández aparca de manera momentánea su faceta domo director de cine para sumergirse de nuevo en mundo que le apasiona como es el cómic. Su trabajo más reciente como guionista es una novela gráfica, ilustrada por Daniel Tomás, que lleva el título de El fin del mundo (editorial Cascaborra). Este cómic ya está a la venta y unos días antes de su presentación en Cuenca, en La Comicteca, el 27 de septiembre, Juanra desvela a La Tribuna algunas de las claves de esta aventura creativa.
«La idea de este cómic surgió como un guión cinematográfico sobre una idea en la estuve trabajado hace tiempo que partió de una fotografía de Rusia», explica Juanra. La trama de El fin del mundo traslada al lector a 1943, al frente ruso, en la batalla de Krasny Bor, «probablemente una de las más cruentas de la Segunda Guerra Mundial, sobre todo en el frente ruso» en la que participó la División Azul. Pero no es sólo un relato bélico. Va más allá, ya que «es una historia de supervivencia que se convierte en una historia de terror puro y duro en la estepa rusa».
El cómic relata cómo un joven sobrevive al bombardeo de Krasny Bor y ayudado por un compañero, consigue alejarse de la batalla. Sin embargo, tienen delante el vacío inhóspito de la inmensidad nevada. En su huida, se cruzan con unos milicianos del Ejército Rojo, y ese infortunio, leve y rápido, deja a Gardel, el protagonista solo ante la vasta blancura. «No es su guerra, siendo enemigo de nadie y de todo el mundo», precisa el guionista.
Trabajar codo con codo junto a Daniel Tomás, el ilustrador, fue muy satisfactoria lo que propicia un equilibrio perfecto entre el guión y los dibujos. «Yo había visto ya algún trabajo anterior de él, me gustó mucho y el resultado ha sido perfecto».
Por ahora, sólo se trata de un cómic, pero Juanra no descarta hacer una versión cinematográfica. «Siempre me lo planteo, quizá el cómic sea el primer paso para poder llevarlo a cine porque la historia es muy cinematográfica. Es una historia ficcionada –prosigue el guionista y realizador– dentro de una historia real, lo posterior a la batalla de Krasny Bor».
En cuanto a la elaboración del cómic, Juanra afirma que ha sido «muy divertido», porque «uno de los procesos creativos más interesantes es la documentación», en la que ambos se volcaron. En este sentido, recuerda anécdotas que surgían, por ejemplo el modelo de tanque y descubrir «por dónde se le echa gasolina a un tanque», ya que una de las escenas del guión lo requería. Llegaron a encontrar los planos de ese tanque, con el inconveniente de que estaban en ruso. Es un anécdota, pero es una muestra de la capacidad de detalle que han buscado para describir los uniformes, las armas, los paisajes «o una casa en medio de la planicie nevada rusa».
Sobre las expectativas con El fin del mundo, espera «que le guste a la gente, que lo disfruten, que lo vean como una historia de supervivencia, de terror y sin ninguna connotación política, porque al hablar de la División Azul siempre las hay».
La faceta creativa de Juanra Fernández sigue muy volcada en el cómic. En la actualidad está inmerso en dos nuevos guiones para una serie y otra novela gráfica. Además, con la Editorial Cascaborra presentará en octubre Autosuficiencia. Además, está a punto de terminar la película La canción del verano, y este mes rodará algunas de las escenas pendientes.