Los nueve primeros meses no están siendo fáciles para los trabajadores por cuenta propia de la provincia. La triste evidencia es que más autónomos de la cuenta han tenido que bajar la persiana de sus negocios y actividades, a pesar de que hasta junio los datos de afiliaciones al régimen de autónomos eran menos sombríos que hace un año.
Sin embargo, después de junio, mes que dejó con 112 altas el mejor dato del año, comenzaron a torcerse las cosas y desde entonces la pequeña sangría encadena tres meses en cifras negativas. En concreto, la provincia perdió en julio 23 trabajadores autónomos y en agosto otros 37. A Estas cifras hay que añadir los datos de afiliaciones a la Seguridad Social que se conocieron la semana pasada y que también son negativos para los trabajadores del Régimen Especial de Trabajadores Autónomos. Y es que el tejido empresarial conquense perdió otros 91, lo que deja en septiembre una cifra total de 18.299 inscritos en el RETA cuando hace justo un año era de 18.361.
Lo malo, es que esta tendencia es la que se vaticina desde la Asociación Intersectorial de Autónomos de Cuenca, cuyo secretario, Miguel Ángel Santos, considera que «se seguirá produciendo un descenso de autónomos en la de línea de años precedentes al menos hasta que comiencen a producirse los primeros síntomas de actividad por la campaña navideña».
Muchas veces se habla de los autónomos como el sector más débil del mundo empresarial, y por eso las distintas asociaciones que los representan reclaman mas ayudas. Una de sus reivindicaciones históricas es la de regularizar las cuotas de los autónomos para ajustarlas a los ingresos reales. Precisamente ayer se dio un paso en este sentido porque la Seguridad Social abordó la regularización de cuotas de los autónomos relativa al 2023, año en el que comenzó el nuevo sistema de cotización por el que los trabajadores por cuenta propia deben cotizar según sus rendimientos reales. La ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, avanzó la semana pasada la convocatoria de esta mesa con los autónomos para comenzar a trabajar en un proceso que esperan culminar para el primer trimestre de 2025. En 2023, los autónomos estrenaron un nuevo modelo, pactado entre las principales asociaciones y el Gobierno.