La Red de Calor de Cuenca, promovida por REBI, ha dado hoy un paso más en el desarrollo de su proyecto, con la inauguración, por parte del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, de la central térmica; una infraestructura que convierte a la capital conquense en un referente en sostenibilidad y eficiencia energética en España. Un acto, por cierto, que se ha desarrollado de manera sobria, lo que ha permitido que parte de los fondos previstos al evento se hayan destinado a apoyar a los damnificados por la DANA en Castilla-La Mancha.
Para el presidente autonómico, esta red de calor supone un «ejemplo» y un «código de mensajes, en una época en la que, estamos viendo, cómo no podemos permanecer impasibles ante los fenómenos de la naturaleza» ocasionados a causa del cambio climático. «La realidad es que casi todos los que son negacionistas» resultan ser también "egoístas" por carecer de «solidaridad intergeneracional», ha considerado.
Y, en esta línea, ha recalcado que «la sostenibilidad ya no es una opción» y «tenemos que esforzarnos en que no solo nos muevan razones de tipo moral, sino también de tipo económico y social», ya que «estamos demostrando que ser los mayores propietarios de reserva verde de España, como es la provincia de Cuenca» es, en paralelo, «nuestra industria, una industria de hoy y una industria de futuro», ha expuesto.
Distintos momentos de la inauguración de la central térmica de la Red de Calor de Cuenca. - Foto: Reyes MartínezAl respecto, ha puesto el foco en que el nuevo Hospital de Cuenca, que será inaugurado el próximo 19 de diciembre, «será uno de los más sostenibles», por lo que ha celebrado el hecho de que «lo que entre todos pagamos en impuestos termina revirtiendo en beneficio de todos».
De ahí, ha ahondado en que «Europa y España necesitan, como el comer, ganar en soberanía energética, ser dueños de nuestra propia energía», ha continuado, al tiempo que ha llamado a que «aprovechemos lo que tenemos, nuestros recursos» dado que «empieza a haber ya una parte importante de la economía en el mundo» que se sustenta en la «nueva economía».
Ha llamado la atención sobre el «factor estratégico» que supone que «cada vez haya más familias empleadas» en estos sectores enfocados en la «lucha contra el cambio climático y por las nuevas energías», y ha aseverado que «tenemos la capacidad de incrementar más de un 20 por ciento la competitividad de la sociedad» por ser «productores de nuestra propia energía».
Distintos momentos de la inauguración de la central térmica de la Red de Calor de Cuenca. - Foto: Reyes MartínezTodos han destacado el impacto de este proyecto para la región y han subrayado el papel clave de REBI en la transición hacia una energía limpia y de proximidad.
Red de Calor de Cuenca. Y, en este sentido, el presidente ejecutivo de REBI, Alberto Gómez, ha destacado la gran confianza depositada por los vecinos en el proyecto, porque «en este momento ya contamos con 1.203 viviendas conectadas de 15 edificios, y otras 1.421 de otros 48 edificios más están esperando ya la conexión. Entre las que disfrutan del servicio se encuentran la comunidad de las Doscientas o la comunidad Ciudad Encantada, compuesta por 714 viviendas, es el cliente más voluminoso que tenemos de todas las Redes con las que operamos en otras ciudades».
A ellas también se han sumado, tal y como ha detallado, iniciativas privadas como el Hotel Torremangana, o instalaciones públicas como el IES San José, el IES Alfonso VIII, con la Escuela Oficial de Idiomas, o Cáritas Diocesana, además de la residencia universitaria Alonso de Ojeda.
Distintos momentos de la inauguración de la central térmica de la Red de Calor de Cuenca. - Foto: Reyes MartínezLa Red de Calor de Cuenca, con una inversión que puede llegar a alcanzar los 50 millones de euros y una generación de más de 20 empleos cualificados, está diseñada para abastecer un mínimo de 10.000 viviendas más en los próximos cinco años, así como edificios comerciales e industriales, con una potencia total de 28 MWt.
Un depósito de inercia de 10.000 metros cúbicos asegura el abastecimiento durante los picos de demanda de energía. La producción estimada de la Red alcanzará los 100 GWh, que circularán por 25 km de red en constante evolución.
Gracias a este sistema, se estima que la ciudad reducirá sus emisiones de CO? en 25.000 toneladas anuales, contribuyendo significativamente a la mejora de la calidad del aire en el casco urbano y reduciendo los costos energéticos para los usuarios, sin costes de inversión. Un suministro de energía estable y menos vulnerable a las fluctuaciones del mercado energético internacional.
Distintos momentos de la inauguración de la central térmica de la Red de Calor de Cuenca. - Foto: Reyes MartínezLa biomasa, procedente de la limpieza de los montes de la provincia, es la materia prima utilizada en esta red para producir energía. La provincia de Cuenca cuenta con una superficie forestal arbolada de 690.000 hectáreas, la posibilidad de biomasa para distintos tipos de aplicaciones supera el millón de toneladas anuales. Además, este proyecto genera empleo local tanto en su construcción como en el mantenimiento y operación, fomentando así trabajo estable en áreas que suelen enfrentar problemas de despoblación.
«Y no es el único proyecto que tenemos en la provincia de Cuenca porque acabamos de poner en servicio una planta de biomasa que suministra energía a la empresa Incarlopsa en una de sus fábricas en Tarancón, más de 30 GWh de energía renovable, que supone un ahorro de más de 7.300 toneladas de CO? anuales», ha añadido Alberto Gómez.
Hibridación pionera. REBI ha diseñado un sistema de generación de energía pionero en España que ya ha incorporado a la Red de Calor de Cuenca.
«El propósito de este nuevo sistema es ampliar la potencia de la central de generación de calor mediante la instalación del campo solar de producción térmica y eléctrica. Hemos instalado un modelo de paneles solares de última generación, capaces de producir simultáneamente energía térmica y eléctrica. Dicha instalación alimenta una bomba de calor de alta eficiencia para refrigerar el agua que circula a través de los paneles y permitir que trabajen a una temperatura óptima de 35 grados centígrados aproximadamente. Esto facilita que los módulos solares puedan alcanzar un muy elevado rendimiento de producción energética», ha precisado
Esta innovadora hibridación optimiza la producción energética, permitiendo que la Red de Calor utilice tanto la energía térmica generada por biomasa, como la eléctrica y el calor en forma de agua caliente generados por los paneles solares.
La eléctrica se destina completamente al autoconsumo, por lo que, a la vez de que se mejora el rendimiento, se reduce el uso de biomasa, contribuyendo aún más a los objetivos de sostenibilidad.
Para REBI, la Red de Calor de Cuenca representa el futuro de las ciudades sostenibles, apostando por un modelo de economía circular que respeta el entorno y potencia la autonomía energética y la economía de nuestros municipios. «Hoy, más que nunca, estamos comprometidos con la transición hacia una energía limpia y segura para las próximas generaciones», ha sentenciado el presidente ejecutivo.
Transición ecológica. REBI, que inicia su andadura en 2012, opera actualmente a nivel nacional en seis ciudades, con más de 20.000 clientes contratados y conectados.
La compañía lleva adelante numerosos proyectos que contribuyen a la descarbonización de sus consumidores residenciales y ofrecen soluciones sostenibles para empresas e industrias, incluyendo redes de calor y proyectos industriales de descarbonización y la Red de Calor de Cuenca es un hito más en el crecimiento de REBI.
En España aún queda mucho por hacer en esta área, y REBI ha liderado el sector desde que puso en funcionamiento la Red de Calor más extensa del país en Soria, junto con otra en el municipio soriano de Ólvega. A partir de ahí, la experiencia se ha extendido a Aranda de Duero, Guadalajara, Cuenca y Móstoles.
Con esta inauguración, REBI refuerza su papel en el desarrollo de redes de calor en España, impulsando el cambio hacia una sociedad más respetuosa con el medio ambiente y promoviendo una economía local sostenible. La central de Cuenca es un claro ejemplo de cómo una empresa comprometida con la sostenibilidad puede contribuir a transformar el panorama energético de toda una región.
A dicho evento han asistido, entre otras muchas autoridades, el vicepresidente regional, José Luis Martínez Guijarro; el presidente de la Diputación, Álvaro Martínez Chana; y la subdelegada del Gobierno central, Mari Luz Fernández.