El Rebi Cuenca regresa este domingo (18,30 horas) a la competición liguera con un difícil compromiso a domicilio ante el Anaitasuna. El equipo dirigido por Lidio Jiménez tendrá que armarse de confianza y sensaciones para remontar el vuelo en esta segunda parte del campeonato, donde intentará mejorar sus registros para escalar poco a poco posiciones.
Lidio Jiménez explica que el cuadro navarro es «un equipo de guerreros que va a muerte, con una intensidad máxima tanto en ataque como en defensa». En todo el partido «no paran de correr y compiten durante todos los minutos», por lo que se presenta un duelo «muy complicado». Al Rebi Cuenca no le queda otra que dar su mejor versión para intentar sumar los dos puntos.
El técnico conquense confía en su grupo y esperará al desarrollo del juego del domingo «para ver cómo estamos físicamente», teniendo en cuenta el parón de competición durante más de un mes y medio. No obstante, Lidio Jiménez se muestra contento porque «hemos trabajado bien» e incluso es optimista porque «no tiene por qué salir mal la cosa».
Para este duelo ya no estará el lateral derecho Fede Pizarro tras desvincularse del club por mutuo acuerdo. Lidio Jiménez se deshace en elogios a la hora de hablar del argentino y agradece todo su compromiso. Es una «baja muy importante porque se trata de un líder y un jugador destacado tanto dentro como fuera de la pista». Así, el Rebi Cuenca, con prácticamente todos sus efectivos, buscará sumar los dos puntos en Pamplona, antes de recibir la siguiente jornada al todopoderoso Barcelona.