Octubre de récord el que han cerrado los establecimientos hoteleros de la provincia de Cuenca en esta temporada de otoño.
Y es que los números arrojados no solo sitúan a octubre como uno de los mejores meses de lo que llevamos de año, tanto en viajeros como en pernoctaciones, sino que, además, se convierte en uno de los mejores octubres de las dos últimas décadas, al menos en estancias.
El último informe mensual del Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre Coyuntura Turística Hotelera constata el buen momento de estos alojamientos turísticos en el décimo mes del año.
La ocupación hotelera se cifró en octubre en el 42,9% de media y aumentó al 45,2% los fines de semana; las cifras más altas en este mes de los últimos cinco años. - Foto: Reyes MartínezBasta con echar un vistazo a los viajeros alojados en este periodo y que se han cifrado en 30.861, un 11,5% más que en septiembre, cuando se quedaron en algo más de 27.500, un 2,2% por encima de los 30.199 de hace un año y deja atrás los niveles de prepandemia, que se redujeron a 30.168 en el 2019.
Como viene siendo habitual, la gran mayoría de estos visitantes son turistas nacionales, algo más de 26.700 de los casi 31.000 de este periodo, lo que equivale al 86,6%.
Pernoctaciones. Si el número de viajeros ha sido bastante bueno, el volumen de pernoctaciones en este periodo ha sido mucho mejor.
No en vano, los hoteles de la provincia registraron la importante cifra de 55.684 estancias, casi 6.500 más que en el mes anterior, un 12,4% por encima de prepandemia (2019) y, lo más destacado, la cifra más alta en octubre de los últimos 14 años; sin olvidar que es el tercer mejor dato en este mes de lo que llevamos de siglo XXI, solo superado por las 62.910 pernoctaciones de 2007 y las 55.725 de 2009.
Así las cosas, no es de extrañar que la delegada de la Junta en Cuenca, Marian López, comparta su satisfacción por estos datos, que, según subraya a La Tribuna, "son el resultado de un trabajo conjunto que viene realizando el Gobierno regional, la Diputación, los ayuntamientos y el propio sector del turismo para mejorar las infraestructuras y servicios turísticos, difundir nuestro patrimonio y promocionar Cuenca como el destino excepcional que es, desde el punto de vista paisajístico, natural, cultural, gastronómico, etc.".
Recuerda, en este sentido, que, "en estos momentos, en la provincia de Cuenca tenemos concedidos cuatro Planes de Sostenibilidad Turística -uno en la capital y otros tres Belmonte, el Valle del Cabriel y la Sierra y La Mancha Conquense-, con una inversión de nada más y nada menos que 11 millones de euros para dinamizar este sector, con criterios de sostenibilidad".
El resto de números del sector hotelero van en la misma línea, como es el caso de la ocupación, que en octubre se ha situado en un grado medio medio del 42,9 por ciento, la cifra más elevada de los últimos cinco años; dato que se incrementa hasta el 45,2% los fines de semana, también por encima de los números arrojados desde 2019.
No ocurre lo mismo con la estancia media, puesto que se ha cifrado en 1,80 días, ligeramente por debajo de la registrada en los últimos cinco años.
Aún así, la rentabilidad ha compensado el desfase, ya que tanto el ingreso medio por habitación disponible (RevPAR) como el de por habitación ocupada (ADR) es el mayor de los últimos tres años, con 29,47 y 69,99 euros, respectivamente.
La capital. Los hoteles de la capital, por su parte, han tenido buenas cifras en octubre, pero, sin duda, no tan excepcionales como los de la provincia.
De hecho, el número de viajeros ha llegado hasta los 17.788, un 8,3% más que en septiembre y la mejor cifra en el décimo mes del año de los últimos cuatro ejercicios, pero, eso sí, sigue por debajo de los niveles de prepandemia, 814 menos que en 2019.
Como es de esperar, las pernoctaciones se han comportado de manera similar y las 32.938 contabilizadas superan en un 2,6% las del mes anterior y se convierten en las más elevadas de los últimos cinco años, incluso, por encima de las 31.488 de 2019.
Los viajeros se han hospedado de media en los hoteles de la capital 1,85 días, la cifra más baja de los últimos cuatro años, pero por encima de los niveles previos a la pandemia, como los 1,69 días de 2019.
Algo que más o menos se repite en la ocupación hotelera, que se ha situado en una media del 59,2%, casi cinco puntos más que en 2019, mientras que los fines de semana ha subido al 64,6%, cinco puntos por detrás de la de 2019 (69,5%).
Y, en este caso, en contra de lo ocurrido en los hoteles de la provincia, los principales indicadores de rentabilidad de estos alojamientos apuntan a un ligero descenso con respecto a los últimos tres años.
Así, el ingreso medio por habitación disponible (RevPAR) se ha elevado a los 44,64 euros, un 6,3% menos que hace un año y un 12% por debajo de los 50,74 euros de 2021.
De la misma manera, el ingreso medio obtenido por habitación ocupada (ADR) ha ascendido a los 77,25 euros, ligeramente por debajo de los 77,75 de 2022 y un 1,5 por ciento inferior a los 78,45 euros de 2021.