Los hermanos Millán Cañas, de La Ponderosa, serán reconocidos este año por la Agrupación de Hostelería y Turismo de Cuenca debido a su trayectoria empresarial, y como tal, la familia Millán recibirá este premio durante la celebración de la Asamblea General de esta organización empresarial el próximo lunes 29 de julio.
Ambas familias recibirán este reconocimiento de todos sus compañeros en el Club de Golf Villar de Olalla por su profesionalidad y buen hacer durante más de 50 años al frente de su establecimiento.
Además, en este evento también habrá otros dos premios, uno por la contribución al sector hostelero en la provincia que recaerá en Globalcaja y otro por su contribución al sector turístico en la provincia que recaerá en la Catedral de Cuenca.
Con esta entrega de premios, la Agrupación de Hostelería quiere acompañar y respaldar la labor tanto de estos empresarios como de estas entidades, visibilizando su papel.
Hermanos Millán. Rafa y Ángel Millán, con 23 y 16 años respectivamente, montan La Ponderosa en 1973 en la misma ubicación que tienen actualmente. Estos hermanos de Palomares del Campo fusionaron la estética del rancho de la serie Bonanza a la que deben el nombre con materia prima de este pueblo como es la rueda del carro que todavía permanece en la puerta.
Sus primeros pasos en el sector fueron en Casa Julián, en La Poveda, un barrio de Arganda. A su jefe le gustaba trabajar sólo con productos de calidad, y ahí fue donde aprendieron y quisieron traer ese concepto a su propio establecimiento. Empezaron a trabajar los productos de la tierra, embutidos carnes, micología…y a consolidar sus grandes platos como son las setas, el jamón que con tanta maestría cortaba Rafa, y por supuesto la oreja que está en su carta desde el inicio.
Posteriormente la Ponderosa añade a su barra productos del mar con la única condición de que sea lo mejor del mercado y, siempre apostando por conseguirlos en su punto de origen, sin intermediarios como ocurre con los percebes de Cedeira, la gamba blanca de Huelva o lo salmonetes de San Carlos de la Rápita.
Con el paso del tiempo, Ángel y Rafa forjaron una clientela local fiel que se fue ampliando con clientela de otros puntos de nuestro país, siendo un lugar de obligado paso para los turistas y son innumerables las personas conocidas de este país que han sido asiduos de este establecimiento, llegando a entablar con ellos una relación de amistad.
Ahora, con más de cincuenta años de trayectoria, con el trabajo su hermana Margarita, de sus esposas, y con el recuerdo de Rafa que lamentablemente falleció hace 11 años dejando un gran vacío tras la barra, La Ponderosa sigue siendo un referente con Ángel como anfitrión y estandarte.
Globalcaja. La Fundación Globalcaja siempre ha estado al lado del sector hostelero en la provincia, apostando desde hace muchos años por el desarrollo de eventos que pusieran en valor su actividad y promocionaran el sector. Así, a cada idea o iniciativa que se planteaba desde la Agrupación de Hostelería, había una respuesta afirmativa y un apoyo de esta entidad financiera como parte de su compromiso con nuestra tierra y con su promoción y desarrollo económico.
Además, debemos destacar su red de oficinas físicas y la atención cercana y profesional de sus empleados, que facilitan a nuestro sector su trabajo, siendo justo que ahora reciban el premio de aquellos que siempre han encontrado su respaldo.
Catedral. La Catedral de Cuenca es uno de los emblemas más claros del turismo de nuestra ciudad y provincia junto a otros monumentos como las Casas Colgadas, pero es que además sus responsables han potenciado su valor de manera exponencial.
Así, aprovechando los muchos valores de este edificio que comenzó a realizarse en el siglo XII y que siguió realizándose hasta el siglo XVII, han potenciado sus diferentes espacios y convirtiendo su visita y conocimiento en una de las principales motivaciones de los turistas para visitar Cuenca.
De este modo se ha apostado por aspectos como la celebración de eventos, se han acogido distintas exposiciones e incluso se ha incorporado una programación musical en su interior.
Por otro lado, han querido vincularse a la sociedad conquense y a la educación con actividades pedagógicas, incorporando un dossier de recursos didácticos a disposición de la comunidad educativa.
Además, han querido que sea un espacio accesible a todos con iniciativas como los lunes culturales o el día de la catedral.