El esfuerzo y la superación permiten alcanzar los sueños. Eso lo sabe muy bien la nadadora conquense Silvia Lara Perea (Cuenca, 1982), que tras 26 años compitiendo al máximo nivel, y tras lograr una larga lista de títulos y récords, dice adiós al deporte de élite.
Silvia, que derrocha alegría y sentido del humor, es el ejemplo perfecto de que no hay barrera insuperable. Atrás quedan muchas horas de trabajo, entrenamientos y competiciones al máximo nivel. Ahora llega la hora de cambiar el chip para esta conquense, con raíces en Mota del Cuervo, que se mueve por la vida con la misma soltura que en el agua. De su trayectoria, logros y objetivos hablamos con ella en esta entrevista en La Tribuna.
Acabas de despedirte de la competición en Ciudad Real tras 26 años plagados de éxitos. ¿Qué significa este momento para ti?
Sí, además fue en Ciudad Real donde logré mi primer campeonato de España. La verdad es que fue algo muy emotivo y muy especial, con sensaciones bestiales.
¿Por qué has tomado la decisión de abandonar la competición?
«Si uno lucha por lo que quiere al final se consigue" - Foto: E. LeónTras 26 años compitiendo a nivel regional, nacional e internacional creo que llevo mucho tiempo nadando y creo que ya está bien. Es el momento de dar el paso a una nueva etapa y empezar otra, además de dar paso a los jóvenes.
Aunque ya no compitas, vas a seguir nadando...
Claro que sí. Voy a seguir nadando y voy seguir entrenando, pero ya de otra manera. Todos los días entrenaba como mínimo una hora y media, pero seguiré nadando.
Tienes más de 30 título de campeonatos nacionales y 60 regionales, además quedar tercera del mundo en los 50 metros mariposa. ¿Qué recuerdo especial guardas?
Uno muy especial es el de la piscina cubierta en el complejo deportivo Luis Ocaña, que lleva mi nombre. Silvia Lara Perea.Además, me enorgullece mucho que me entregaran la Medalla de Plata al Mérito deportivo de Castilla-La Mancha, el Premio al Deporte Ángel Lancho o haber cruzado a nado el Estrecho de Gibraltar, en 2008.
¿Cómo surgió la aventura de cruzar el estrecho?
Pues me llamaron de la Federación de Cultura y Deporte, desde Toledo, para ver si quería hacer el reto de la Discapacidad.A raíz de eso dije que sí y junto a otros cuatro deportistas discapacitados más lo cruzamos por relevos.
¿Qué sientes cuando nadas en la piscina que lleva tu nombre?
Mucha alegría. Estoy muy contenta y muy orgullosa de todo lo que he logrado y estoy dando.
¿Qué enseñas a los nuevos nadadores y a las nuevas generaciones?
Una cosa muy importante es que no hay que relajarse y que hay que trabajar y entrenar para conseguir las metas y logros. Hay que entrenar duro, las personas tienen que ser activas y no quedarse en sus casas.
¿Hay cantera en Cuenca?
La verdad es que no mucha.
¿Cómo recuerdas tus inicios en el Club Natación Cuenca?
Fue el año 1997, cuando empecé a entrenar en el Club Natación Cuenca. Comencé a nadar por un problema de espalda del que me había operado cuando tenía cuatro meses. A raíz de eso me planteé, muchas metas, alcancé muchos logros y mira ahora dónde estoy. En 1999 participé por primera vez en una competición de deporte federado para discapacitados intelectuales.
¿La braza es el estilo en el que te sientes más cómoda ?
Sí, soy brazista y estilista. Me gustan mucho ambos.
Y también fuiste tercera del mundo en mariposa...
Sí. Fue en los campeonatos del Mundo en Atenas, en 2011.
¿Tienes la espinita clavada de no haber participado en unos Juegos Paralímpicos?
No pude ir debido al fraude que hubo en los Juegos Paralímpicos de Sydney del año 2000. Y me hubiera gusta ir, claro, porque tuve cuatro récords de España en 50 metros braza, en 200 estilos y 100 estilos.
Además de medallas, tienes una larga lista de reconocimientos, entre ellos el de Hija Predilecta de Castilla-La Mancha.
La verdad es que es maravilloso que reconozcan mis logros y estoy muy contenta, de verdad.
¿Ahora que has dejado la competición de quién te acuerdas o a quién quieres agradecer su apoyo?
Me han ayudado mis padres, mi hermana y mis sobrinas. Se lo quiero agradecer a todos ellos los que he conseguido. A mis entrenadores, a los compañeros del Club Natación Cuenca. A mucha gente.
¿Eres el ejemplo de que si se lucha y se trabaja lo sueños se terminan conviertiendo en realidad?
Sí. Al final se consiguen, pero nadie te regala nada. Si uno lucha por lo que quiere al final lo consigue. Eso sí, hay que trabajar todos los días. Yo entreno una hora y media o dos diarias.
¿Qué te planteas ahora que dejas de competir?
Seguiré trabajando en la Universidad de Castilla- La Mancha, colaborando en Adocu y también estoy en la junta directiva de la Federación de Deportes para Personas con Discapacidad (Fecam). Además me planteo ser auxiliar de entrenadora y ayudar a los míos, a mis compañeros y amigos.
¿Has cumplido todos tus objetivos en la vida?
No. Todavía, no. Tengo todavía muchos objetivos por delante y no me falta el ánimo. Sueño con hacer más cosas, soy muy activa y quiero que siga siendo así.
Toda una campeona, dentro y fuera del agua
El curriculum deportivo de Silvia Lara Perea tras 26 años en activo es impresionante. Atesora un montón de títulos, récords y reconocimientos. Si hay un premio a su exitosa carrera y que le hace especial ilusión es la piscina municipal que lleva su nombre y a la que acude a diario para nadar. En su medallero, la deportista conquense hay más de 60 títulos regionales, 30 nacionales y medallas en campeonatos internacionales. Además, entre otros premios es tiene el título de Hija Predilecta de Castilla-La Mancha, la medalla de Plata al Mérito Deportivo de Castilla-La Mancha, el Premio al Deporte Ángel Lancho o la Silla de Oro de Aspaym, sin olvidar que fue pregonera de Mota del Cuervo.