La Unión Europea ha dado un toque serio a España por contaminación de las aguas por culpa de los nitratos que proceden de productos que se utilizan en la agricultura y ganadería. Toca ponerse las pilas porque Castilla-La Mancha es una de las regiones catalogadas como zonas vulnerables. Por eso la contaminación de nitratos será una de las protagonistas del cambio que quiere hacer la Junta con la Ley de Calidad Ambiental. La Consejería de Desarrollo Sostenible acaba de cerrar una consulta pública para reformar esta normativa. Por eso no hay todavía un borrador, pero desde el Gobierno regional dejan algunas ideas claras de lo que quieren hacer.

Una de las novedades será la implementación de sanciones específicas por contaminación de nitratos. En el documento previo publicado por la Consejería avisan del problema que hay ahora con la «ausencia de un régimen sancionador específico en materia de protección de las aguas contra la contaminación difusa procedentes de nitratos de origen agrario». Esta falta de sanciones hace que no sea tan fácil hacer cu mplir la normativa. «Dificulta la exigibilidad de medidas concretas destinadas a evitar dicha contaminación», exponen. 

De hecho, uno de los objetivos concretos de la norma será «contribuir a la protección de las aguas contra la contaminación difusa por nitratos procedentes de fuentes agrarias», tal  y como reza el documento de Desarrollo Sostenible. Se hará siguiendo las previsiones recogidas ya en la normativa de la UEy en la estatal. 

A nivel nacional se remiten a un Real Decreto de 2022 que impone «importantes obligaciones a las comunidades autónomas». Eso requiere un desarrollo normativo ad hoc.

Aparte del tema de los nitratos, el Gobierno regional quiere también meter mano a los procesos de intervención ambiental. Avisan de que son de gran complejidad técnica y eso hace que su tramitación se dilate en el tiempo y que el seguimiento de los pronunciamientos ambientales con los que hay que poner el fin a estos procesos no se puedan realizar o con la frecuencia o con el rigor recomendable. 

Por eso uno de los objetivos es «agilizar la tramitación de los procedimientos de intervención ambiental e intensificar el control de las actividades potencialmente contaminantes».

La elaboración de una ley lleva su tiempo. Ahora ha terminado la consulta previa, que permite participación pública, pero después la Consejería tendrá que redactar el borrador, lo volverá a someter a información pública y no será hasta la aprobación en el Consejo de Gobierno cuando pase al Consejo Consultivo para su revisión y después a las Cortes para su debate final y votación.

Antes de que llegue la ley el Gobierno regional ha adoptado algunas medidas nuevas para controlar la contaminación de nitratos. Agricultura publicó recientemente la orden que regula la actuación aplicable a las zonas vulnerables a la contaminación por nitratos de origen agrario y que databa de 2010.  Afecta sobre todo al uso de estiércoles y fertilizantes en terrenos inclinados de cultivo. Según va subiendo la inclinación, más se limita el uso. De hecho, a partir del 15 por ciento, se prohíbe la aplicación superficial y subsuperficial de estiércoles y fertilizantes de nitrógeno y fósforo, tanto sólidos como líquidos.