El sector hotelero conquense ha vivido el mejor mayo de todos los tiempos, con cifras récord en este mes tanto en viajeros como en pernoctaciones, hasta el punto de acercarse a niveles de agosto, el periodo del año con mayor afluencia de visitantes a este tipo de alojamientos.
Y es que los establecimientos hoteleros de la provincia han logrado en el quinto mes del año un total de 35.243 viajeros, 9.204 más que hace un año, lo que supone un incremento interanual del 35,2%, y un total de 62.166 pernoctaciones, 17.178 por encima de mayo de 2023, lo que equivale a un aumento interanual del 38,2%, tal y como recoge la Encuesta de Ocupación Hotelera del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Unas cifras que sitúan a Cuenca como la provincia que más crecido en viajeros y pernoctaciones en este periodo, a lo que se suma el hecho de que en estos cinco primeros meses del año ha acumulado también más clientes y estancias que en el mismo periodo del ejercicio anterior. En concreto, ha registrado 119.386 viajeros frente a los 113.761 de enero a mayo de 2023 y 215.669 pernoctaciones frente a las 209.451 de hace un año.
Buen balance. Con estos números, no es de extrañar que, desde el sector hotelero conquense se muestre su satisfacción. De hecho, el presidente de la Agrupación Provincial de Hostelería y Turismo (APHT) de Cuenca, José Manuel Abascal, habla de un «buen mes de mayo», aunque recuerde que, pese a la subida de los precios, Cuenca sigue teniendo de los más bajos del país.
Aun así, se muestra optimista de cara a la temporada estival, hasta el punto de ver en las cifras de mayo la antesala de un «buen verano», aunque «hasta que no concluya no se sabrá con certeza», apunta.
Considera que «vamos por buen camino» si bien en turismo, según precisa, «no hay que descuidarse ni un solo día» y no se puede dejar la promoción del destino y la organización de eventos y actividades que hagan a Cuenca más atractiva para el visitante. Todo ello, en su opinión, combinado con una apuesta por fortalecer el tejido empresarial, que dé «movimiento en el día a día, tanto a la capital como a la provincia».
Entre tanto, las cifras de mayo son para enmarcar. No sólo se ha logrado una estancia media de 1,76 días en la provincia y de casi dos en la capital, sino que se ha llegado a una ocupación entre semana del 39,4% de las plazas hoteleras de la provincia y del 52,1% los fines de semana, mientras que en la capital se situaron en el 68,7% y 90,8% respectivamente.