Como si se tratase de uno de los premios del Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad, el Ayuntamiento de Cuenca recibía el pasado 22 de diciembre el informe jurídico del Servicio de Contratación que avalaba la prórroga y modificación del contrato del Servicio Municipal de Autobuses Urbanos, que entraba en vigor en octubre de 2022.
El alcalde de la capital, Darío Dolz, así lo ha dado a conocer hoy a los medios de comunicación y ha asegurado que «supone el pistoletazo de salida para la remodelacón del transporte urbano de la ciudad».
Este informe, según el regidor, viene a respaldar el plan municipal para ampliar cinco años el contrato con la actual adjudicataria, Líneas Urbanas de Cuenca (LUC), y remodelar el servicio de autobuses urbanos con un nuevo mapa de rutas, que incluya nuevas zonas, como el Hospital Universitario o el Centro Nacional de Estudios Penitenciarios, además de dar cabida al convenio con el Ministerio de Transportes por importe de 600.000 euros para el servicio de lanzaderas a la estación del AVE Fernando Zóbel y, sin olvidar, por supuesto, la renovación de la flota con ocho nuevos autobuses eléctricos.
Incorporación de estos vehículos que, tal y como detallazo el primer edil, continúa pendiente de la finalización de las obras para incrementar la potencia eléctrica en las cocheras de la empresa adjudicataria de este servicio municipal con el objeto de poder poner en marcha ocho puntos de recarga para los nuevos autobuses.
Dolz ha mostrado su satisfacción no sólo por este espaldarazo a la remodelación planificada de los autobuses de la ciudad, sino también para dejar claro a aquellos que en diferentes plenos han venido poniendo en tela de juicio la legalidad de esta prórroga del contrato que se trata de algo jurídicamente adecuado, aunque, eso sí, ha dejado claro que «pese a la falta de dicho informe jurídico, estábamos tranquilos porque sabíamos que no había otra posibilidad en este asunto».