A la Balompédica le cuesta cada vez más sacar los partidos adelante. No es falta de ganas ni actitud, de eso va sobrada a pesar de los pesares, pero tiene unas limitaciones claras para medirse con garantías a casi todos sus rivales. En Navalcarnero, más allá de un grosero error arbitral que le condenó, demostró ser incapaz de sumar en positivo. 

Al Conquense le costó entrar en contacto con el balón, que en líneas generales monopolizó el Navalcarnero en los primeros compases, como también las mejores ocasiones, en notables incursiones por ambas bandas. El equipo de Rober logró estirarse gracias a un buen disparo desde la frontal de Antonio Fernández, al filo del minuto 20, que se marchó desviado por muy poco.

El guión del partido varió entre poco y nada durante los siguientes minutos, hasta alcanzar la media hora de juego, con más posesión para los locales, que controlaron las hostilidades en la medular, obligando a la Balompédica a jugar mediante balones a la espalda que no iban a ningún sitio. En el minuto 30, robo en tres cuartos de los madrileños –en falta a José Álvarez–, contraataque por banda izquierda, balón al corazón del área pequeña y gol de Cruz para el 1-0. El tanto, aunque no debería haber subido al marcador por falta previa, hizo justicia con lo visto en el césped hasta ese instante.

Error arbitral e incapacidad futbolística - Foto: Alfonso Fernández

En el 36' volvió a avisar Antonio con un fortísimo disparo a balón parado, y en el 40' fue el Navalcarnero el que a punto estuvo de hacer el 2-0, pero Bernabéu lo impidió con un gran mano a mano. Donde no llegó el meta blanquinegro fue al disparo ajustadísimo de Fratelli, tres minutos después, que lanzó de forma impecable un libre directo desde el balcón del área. Ahora sí, 2-0, un imposible por delante, y a vestuarios.

En la reanudación, y en la búsqueda de una reacción inicial, el míster almeriense movió filas y dio entrada a Héctor Rubio y el debutante 'Chete', que ocuparon los puestos de Monterde y Ratinho. De nuevo Antonio y sus potentes disparos, fueron lo único que inquietó a los madrileños. Los balompédicos manejaron el esférico, pero de forma estéril, mientras que el Navalcarnero decidió esperar atrás, bien armado y consistente, a la espera de una contra que matara el partido definitivamente... si es que no lo estaba ya. Más cambios, Raúl 'Caba' y Jesús Serrano entraron en lugar de Jairo y de un desaparecido Yuya. También lo hizo Etxebe por Castillo.

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El Conquense, inoperante e incapaz, no invirtió la tendencia... y hasta pudo ser peor. En el 75', penalti a favor de los locales, que detuvo Bernabéu, impidiendo una derrota todavía más abultada. En un final agitadídimo, hubo ocasiones para ambos y cualquiera pudo marcar... pero no. Hasta 'Caba' falló un penalti.