El panorama político conquense ha traído aires de cambio en varias formaciones que acudieron a las urnas y que van a más allá de su influencia o no en las decisiones políticas. Los resultados electorales tienen mucho que ver con su solvencia económica. Y es que el funcionamiento de cualquier partido depende en gran medida de los ingresos que generan para sus arcas los votos de los ciudadanos. Basta con salir a la calle y pasear por el centro de la ciudad para comprobar de qué manera afecta el resultado de los comicios a los partidos. Una respuesta está en sus sedes.
Las recientes citas electorales –municipales y autonómicas del 28 de mayo y generales del 23 de julio– han propiciado algunas modificaciones en la fisonomía urbana que están directamente relacionadas a los resultados en las urnas. Mientras que PP, PSOE y Vox conservan las sedes de sus partidos, en los locales de Ciudadanos y Podemos cuelga el cartel de 'Se Alquila'.
El 28 de mayo la debacle en Ciudadanos se llevó por delante a la única concejala, Cristina Fuentes. Si en 2019 Fuentes entraba en el Ayuntamiento gracias a 1.600 votos, cuatro años después la formación liberal no llegó ni a 500. Eso, unido a que Ciudadanos no se presentó en las elecciones generales obligó a echar el cierre a la sede en la calle Hermanos Valdés.
El local de Ciudadanos, en la calle Hermanos Valdés, está en alquiler tras las municipales - Foto: E. LeónOtras formaciones que concurrieron a las municipales tampoco mantienen ya su local, si bien los abrieron de manera temporal en la calle Carretería. Es el caso de Cuenca nos Une, la agrupación liderada por Isidoro Gómez Cavero, que pasó de seis concejales en 2019 a dos el 28-M. Muy cerca está el local electoral que alquiló +Cuenca Ahora, formación que tan solo obtuvo el respaldo de 962 conquenses, insuficientes para lograr representación municipal.
En el caso de Podemos, que a la cita electoral del 28 de mayo acudió bajo la denominación de Cuenca en Marcha, la situación es curiosa porque aunque gana poder político en la capital, pierde capacidad económica tras los resultados electorales. Una consecuencia es que en la que fue su sede hasta hace poco, en la calle Antonio Maura, también hay un cartel de 'Se Alquila'.
En las elecciones municipales, Cuenca en Marcha, que se presentó a los comicios junto a Izquierda Unida, logró dos concejales en la Corporación conquense, duplicando su presencia respecto a la legislatura anterior. A María Ángeles García, que repite al frente de este grupo municipal, se une Pablo García, coordinador local de Izquierda Unida en la capital, que vuelve a sentarse en el Salón de Plenos, tal y como ya hiciera entre los años 2015 y 2019, siendo además el concejal más joven de la Corporación conquense en esa legislatura.
Sin embargo, el local de la que fue sede de Unidas Podemos está en alquiler desde hace unas semanas. Pese a duplicar la representación municipal en la nueva legislatura bajo el nombre de Cuenca en Marcha, los malos resultados autonómicos de Podemos, donde la formación tampoco obtuvo representación por segunda legislatura consecutiva, no ayudaron. A ello hay que añadir que Podemos afronta un Expediente de Regulación de Empleo y la pérdida de un 67% de la partida presupuestaria pública tras las elecciones generales del 23 de julio. La enorme pérdida de representación política nacional de Podemos ha propiciado que esté en números rojos.
Por su parte, la formación de Santiago Abascal mantiene su sede en la plaza del Xúcar, pese a que perdió 19 escaños y 700.000 votos en la cita del 23 de julio, pero apenas un mes antes se abrió paso en el Consistorio, donde por primera vez obtuvo representación con dos concejales y 2.117 votos.