La larga disputa territorial entre Cuenca y el municipio turolense de Albarracín puede tener sus días contados. Una vez agotada la vía administrativa, al Ayuntamiento de Cuenca sólo le queda interponer un recurso ante la Audiencia Nacional para evitar un bocado de 2.000 hectáreas a su superficie.
El motivo es que el Ministerio de Política Territorial y Memoria Democrática dio la razón a Albarracín en el histórico conflicto administrativo que Cuenca mantiene por los límites del monte público El Entredicho. Este terreno marca el límite municipal y provincial, pero también el autonómico entre Castilla-La Mancha y Aragón, y el Gobierno acaba de dar la razón a Albarracín, No obstante, el alcalde de Cuenca, Darío Dolz, confirmó a La Tribuna que el Ayuntamiento interpondrá recurso contencioso-administrativo, ante la Sala de lo Contencioso-Administrativo de la Audiencia Nacional.
El Ministerio de Política Territorial publicó el lunes en el Boletín Oficial del Estado (BOE) la orden que fija el límite administrativo entre los términos municipales de las dos poblaciones dejando del lado de Albarracín la totalidad del monte de El Entredicho. Considera que el deslinde del monte de El Entredicho, que confirma la propiedad de la localidad turolense, es el criterio que debe prevalecer al fijar, también, el límite entre los dos municipios. No comparte esta postura el Consistorio de Cuenca, para quien la línea debe trazarse por el accidente geográfico más importante de la zona, que es el río Tajo.
Este conflicto fronterizo tiene su origen en El Entredicho, monte que marca un trozo de territorio entre las provincias de Teruel y Cuenca. Desde finales del siglo XIX, Albarracín y Cuenca mantienen un contencioso por las 2.000 hectáreas de terreno y pugnan por delimitar definitivamente el límite provincial.
El Ayuntamiento de Cuenca considera que el río Tajo, que atraviesa el monte, es el que históricamente ha delimitado la frontera entre ambas provincias, pero en el municipio turolense no están de acuerdo. El monte esta gestionado desde 1926 por el Ayuntamiento de Albarracín, aunque se encuentra dentro del territorio conquense.
La decisión Ministerio de Política Territorial que publica el BOE sigue la recomendación del Instituto Geográfico Nacional y del Consejo de Estado. Esta orden cuenta con el aval del Consejo de Estado, que dio su conformidad hace un mes, el pasado 18 de julio. No obstante, pese a que se agota la vía administrativa, no es el fin del litigio porque «los interesados pueden interponer recurso contencioso-administrativo, ante la Sala de lo Contencioso-Administrativo de la Audiencia Nacional, en el plazo de dos meses a contar desde el día siguiente al de su publicación en el Boletín Oficial del Estado». El Ayuntamiento de Cuenca así lo hará porque está dispuesto a llegar hasta el final de este litigio y luchar por mantener una superficie de 2.000 hectáreas.