Se acerca la Semana Santa y las calles de la ciudad se preparan para ello de la mejor forma posible. Los bomberos desplegaron ayer un dispositivo para revisar pavimentos, cornisas, cables o luminosos con el principal objetivo de evitar cualquier tipo de desprendimiento. En definitiva, se trata de una puesta a punto para el correcto y seguro devenir de los cortejos procesionales.
La Gerencia Municipal de Urbanismo elaboró una inspección en aquellos edificios que, estando en los recorridos de las procesiones, podrían entrañar algún tipo de riesgo, se lo trasladaron a los bomberos y éstos han actuado en consecuencia.