El barrio de Santa Quiteria ya está totalmente sumergido en la celebración de sus fiestas en honor a la patrona, uno festejos de vecindario de las más extensos que existen en Tarancón y que desde la hermandad ya valoran de forma «positiva» en estos primeros días de celebración.

Llegados al ecuador de su programación, el barrio se adentra hoy en su «día grande», tal y como adelantaba el presidente de la hermandad, David del Saz Muñoz, la semana pasada. Desde las diez de la mañana se realizará un pasacalles desde el palacio del  Duque de Riánsares, actual Ayuntamiento, hasta la ermita de Santa Quiteria.

Desde la hermandad afirman que se recorrerán aquellas calles habituales por las que por cuestiones de logística no se pasó en la pasada procesión. Además, añaden que como novedad se hará parada en la residencia Arco de la Malena para que los residentes pueden disfrutar también de la Virgen.

Enrique de la Ossa fue el encargado de realizar el pregón de este año. - Foto: JJ.TT.

Acto seguido se oficiará una misa en la parroquia de la Asunción y se realizarán diferentes actos que desde la hermandad aseguran que surgen en pro de «generar unión y armonía entre los vecinos», con actividades dedicadas a los niños o con los torillos de fuego. Este «día grande» de fiesta pondrá el broche dorado y bajará el telón con la verbena y la tradicional pólvora.

El presidente de la hermandad asegura a La Tribuna que estas fiestas reafirman el «interés» de los vecinos en el barrio, y amplía su público a toda la localidad.

Además, recuerda la importancia de generar ese sentimiento entre los más pequeños con actos como el que se realizará mañana con la ofrenda floral con los niños de las guarderías de San Isidro, Santa Quiteria y Nuestra Señora de Riánsares, lo que muestra la «unión» de Tarancón para mantener  tradiciones tan arraigadas como ésta.