Cuenca ha cerrado el año 2023 con cifras récord de criminalidad, tanto en la provincia como en la capital, al haberse alcanzado el número de infracciones penales más alto de, al menos, los últimos ocho años.

Los últimos datos oficiales del Ministerio del Interior indican que el pasado ejercicio se registraron en la provincia un total de 7.412 delitos penales, un 5,3 % más que en 2022, cuando se quedaron en poco más de 7.000, y un 19,1% por encima de los 6.222 de 2019, en prepandemia.

Un crecimiento de la criminalidad del que la capital no es ajena, más bien todo lo contrario. Y, de hecho, ha despedido el pasado año con 2.755 delitos penales, casi un 7% más que hace un año y cerca de un 30% por encima de los 2.131 de prepandemia.

La criminalidad se dispara en 2023 al nivel más alto en 8 años - Foto: Elaboración propia

Ciberdelincuencia. Aunque en ambos casos la criminalidad convencional no ha dejado de subir año tras año, detrás del notable incremento de las infracciones penales en el último lustro se sitúa, sin duda, la ciberdelincuencia, que viene creciendo de manera muy considerable en los últimos ejercicios. 

No en vano, en el último lustro ha crecido tanto que, tanto en la provincia como en la capital, ya representan la cuarta parte del total de infracciones penales; concretamente, el 23,3 y el 24,2%, respectivamente.

En concreto, al término de 2023 se han contabilizado en la provincia un total de 1.724 infracciones penales cometidas a través de las TIC (Tecnologías de la Información y las Comunicaciones), 145 más que en 2022, lo que supone un aumento del 9,2%, y 669 más que hace cinco años, una subida del 63,4%. De éstas, el mayor crecimiento anual se ha registrado en las estafas informáticas, con 1.554, un 10,1% más, aunque también hay que tener en cuenta que representan el 90% de los ciberdelitos.

En la capital no cambian mucho las cosas y ha despedido el pasado ejercicio con un total de 666 delitos informáticos, un 11,4 por ciento más que hace un año. Un incremento que responde a la evolución experimentada por las estafas informáticas, que han alcanzado las 607, un 17% más que en 2022, mientras que el resto de ciberdelitos han caído un 25,3%.

Provincia. Eso sí, este crecimiento de la criminalidad no es generalizado, sino que depende, y mucho, de su tipología. De tal manera que en la provincia, por ejemplo, caben destacar tanto los robos con fuerza en los domicilios, que han aumentado en un 23,6% hasta los 325, como los robos con fuerza e intimidación que han subido un 6,4% hasta los 50. 

Los delitos de índole sexual, por su parte, han descendido notablemente, en especial las agresiones con penetración, que en un año han pasado de 17 a  7, un 58.8% menos.

Idéntica tendencia han registrado las sustracciones de vehículos, que se han reducido en un 25,8% hasta las 23, y los homicidios dolosos y asesinatos en grado de tentativa, que han caído un 40%, al pasar de los 5 del 2022 a los 3 del pasado ejercicio 2023.

Capital. Los delitos graves y menos graves de lesiones y riña tumultuaria son unos de los que más han crecido en la capital, concretamente, un 29% hasta alcanzar los 40, junto a los hurtos, que han aumentado hasta los 557, casi un 14%, y los delitos de tráfico de drogas, que se han duplicado, al pasar de 4 a 9.

Los delitos sexuales también han registrado una notable caída del 41% hasta los cuatro. Y tanto los robos con violencia e intimidación como los robos con fuerza en domicilios, establecimientos, etc. han caído un 24,2 y un 25,9%, respectivamente.