La sanidad pública es gratuita, pero eso no significa que no tenga su coste. Por cada paciente de Castilla-La Mancha, el gasto sanitario asciende a casi 2.000 euros. Con eso da para tener un médico y enfermero de cabecera al que poder ir, un servicio de urgencias, especialistas para patologías concretas y un hospital al que acudir si la cosa se pone más grave. Esta es la media que sale con los presupuestos que ha elaborado la Junta para 2024 y que hoy el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, ha detallado en las Cortes.
En concreto el gasto sanitario por habitantes es de 1.994 euros. Fernández Sanz destaca que ha crecido en 752 euros desde que él es consejero, es decir desde 2015. En cómputo total Sanidad tendrá casi 4.000 millones de euros. En concreto son 3.929 millones de euros, de los que la mayor parte va para el Servicio de Salud, el Sescam, con 3.789 millones. Hay otros 139 millones para Sanidad, donde se encuadra Salud Pública, con un gasto de 43,5 millones en vacunas y cribados, o el área de Consumo. Eso da un gasto diario de 10,3 millones de euros. El consejero destacó que son 3,7 millones más cada día desde que Page preside la región.
Los recursos humanos del sistema sanitario se llevan casi la mitad del presupuesto total. Son 1.885 millones de euros, con un incremento del 4,6 por ciento en un año. El consejero de Sanidad lo argumenta como "consecuencia de una constante política de mejora e incremento de número de efectivos". Solo en formación y captación de especialistas se destinan más de 93,5 millones.
En inversiones el departamento de Fernández Sanz tendrá más de 182 millones de euros el año que viene, con partidas "para seguir trabajando en nuevos hospitales de Cuenca, Albacete y Puertollano". Las inversiones también llegarán a las áreas de salud y consultorios. Fernández Sanz apunta que hay doce proyectos muy avanzados y menciona los de Alcoba de los Montes, Campillo de Altobuey, Guadalajara Los Valles y Tomelloso, pues calcula que estarán finalizados en 2024. Además hay otros 27 proyectos de centros de salud y consultorios que van a entrar en planificación, comenzando trabajos como la redacción de proyectos o la búsqueda de terrenos.
En resumidas cuentas, desde que es el responsable de la sanidad pública castellano-manchega, en 2015, el Gobierno ha destinado a la construcción de hospitales y centros de salud 1.200 millones de euros, «independientemente de quien gobierne en ese pueblo», apostilló.