El bullicio y murmullo de los usuarios y el crujido de las máquinas vuelve a dar vida a las salas. Es todo un clásico, poco después de que concluya la Semana Santa, al igual que ocurre en otras fechas señaladas, porque la mayoría declina la opción de acudir a los gimnasios a ejercitarse durante los días festivos. Tanto que es difícil ver a alguien levantar pesas o correr en la cinta. Cuesta mucho, más de lo normal, teniendo en cuenta lo apretada que está la agenda debido a los encuentros sociales, la vuelta a casa por vacaciones o directamente por la obligación moral de procesionar, entre un sinfín de razones o excusas.
Eso sí, los días de ayuno deportivo pasan factura, en especial a todos aquellos a los que se les acumulan los excesos. Y es que las grandes comilonas, endulzadas con la bendita torrija, puede hacer tambalear la báscula. Pero no hay que alarmarse, porque ya está aquí la vuelta al gimnasio. Y el regreso en masa se percibe claramente en el Sparta Sport Center del centro de la capital.
Carmen Brotons explica que «es complicado venir al gimnasio durante Semana Santa» y confiesa que quiere «recuperar ya la rutina» después de saltarse la tabla de ejercicios por una semana. Esa es la misma intención que tiene su amiga Celia Gabaldón porque «no he mantenido nada de nada la línea» en estas fechas. En la misma situación se encuentra Alejandro Peralta, que es consciente de que «me he pasado bastante» con los excesos y ahora quiere «acabar»con ellos cuanto antes. En su lugar, Pilar Ruiz sí que ha mantenido la línea, pero ha faltado a su cita con la práctica deportiva durante la Semana de Pasión. Ahora desea que su regreso a las salas «no supongo mucho esfuerzo».
La resurrección de los cuerpos - Foto: Manu ReinaEn cambio, Eloy Plasencia lo intentó al menos. De hecho, acudió el Lunes Santo, pero sus ganas se desvanecieron por completo y «no volví durante toda la Semana Santa», bromea. Su amigo Mario Pardo corrió la misma fortuna, aunque ahora vuelve a la rutina para «aprovechar los meses que restan antes de la llegada del verano». Y es que la operación bikini comienza en estos días para muchos usuarios.
Hay también quien habla alto y claro. Jesús Fernández asegura que hay que «respetar la Semana Santa»y directamente adoptó la decisión de «no venir ningún día a hacer ejercicio», detalla entre risas. Su amigo Alberto Bellón sí que hizo un «esfuerzo» e incluso llegó a enlazar tres sesiones seguidas.
Más fotos:
Es cierto que no todos abandonaron la disciplina física. Alba Villanueva se mantuvo a raya porque «no me gusta perder la rutina» y aprovechó para ir al gimnasio tanto el Jueves Santo, como el Sábado de Gloria y Domingo de Resurrección. «Es cierto que como de todo, pero quiero siempre mantener la línea». Es la misma filosofía que comparte Jesús García, aunque no pudo ejercitarse porque regresó al pueblo por vacaciones y en su municipio no hay gimnasio. Con resignación, «vuelvo con las pilas cargadas», sentencia.