El Consorcio de la Ciudad de Cuenca, por encargo del Ayuntamiento, va a renovar y mejorar el Mirador de Ronda, una zona con un área infantil en desuso desde hace bastantes años por su avanzado deterioro, cuya recuperación se ha convertido en una demanda casi histórica de los vecinos de la parte alta de la capital ante la falta de recursos de este tipo en la zona histórica.
Para ello, el Consorcio ha sacado a licitación la ejecución de estas obras, de las que ya dimos cuenta en su momento en La Tribuna, por un importe inicial de casi 216.000 euros, que con impuestos se acerca a los 262.000, y con un plazo para la presentación de ofertas que expira el próximo día 21 de octubre.
Actuación. Con un plazo de ejecución de dos meses, esta urbanización del Mirador de Ronda se centrará principalmente en la adecuación del parque infantil existente, lo que conllevará, a grandes rasgos, desde la sustitución del actual pavimento de arena por otro de polipropileno expandido, la colocación de un vallado perimetral, la renovación integral de los elementos de juego, la instalación de un arenero, la reubicación de los bancos con arreglo a las necesidades del espacio y la instalación de un cartel informativo del área infantil.
Trabajos de mejora éstos que supondrán que la zona destinada a parque infantil se convierta en un espacio seguro para los más pequeños. Y es que, por ejemplo, en el suelo se instalará pavimento Childsplay o similar, el cual ofrece la amortiguación necesaria frente a caídas críticas de tres metros de altura, además de ser antideslizante e impedir la formación de charcos y barro.
Asimismo, se incluye la instalación de nuevos elementos de juego con la necesaria certificación UNE; en concreto, un arenero de madera, un muelle simple de línea natural, una red tridimensional de cuerda con tobogán, un columpio tipo nido, una mesa multijuegos de hormigón y siete medias bolas con diferentes alturas, similares a huevos de pájaro.
En cuanto al vallado, será de dos tipos, por un lado, de troncos de madera en la zona de conexión entre la calle San Martín y las escaleras de acceso a la Plaza de Ronda y, por otro, metálico de forja, que complementará el murete existente por considerarse demasiado bajo al estar en una zona infantil.