El informe sobre el estado de la pobreza de EAPN destaca un gran aumento en las dificultades económicas que enfrenta la población entre 2008 y 2023.
En primer lugar, el porcentaje de personas que experimentan retrasos en el pago de gastos relacionados con la vivienda principal o en compras a plazos ha crecido de un 9,7% en 2008 a un 14,5% en 2022, aunque en 2023 se observa una leve disminución, situándose en un 13,1%.
En el ámbito del confort del hogar, un 21,4% de la población afirma no poder mantener la vivienda a una temperatura adecuada durante los meses de invierno, un aumento notable desde el 4,6% que se registraba en 2008.
El acceso al ocio también se ha visto afectado. En 2023, el 32,6% de los ciudadanos no puede permitirse ir de vacaciones fuera de casa, al menos una semana al año, lo que representa una ligera reducción respecto al 34,7% en 2008. Sin embargo, este porcentaje sigue siendo considerable y pone de manifiesto las limitaciones económicas que enfrentan muchas familias en su tiempo libre.
La situación alimentaria es igualmente preocupante. El informe revela que un 5,1% de la población no puede permitirse una comida de carne, pollo o pescado al menos cada dos días, un incremento desde el 1,1% en 2008.
Otro aspecto relevante es la capacidad de la población para afrontar gastos imprevistos. En 2023, un 37,4% de los ciudadanos señala que no tiene capacidad para cubrir estos gastos, un aumento respecto al 24,3% que se registraba en 2008. Indicando que un número creciente de personas vive al límite de sus posibilidades financieras, sin un colchón que les permita hacer frente a situaciones inesperadas.
En cuanto a la posesión de un coche, la situación parece más estable, con un 2,6% de la población que no puede permitirse tener uno, una cifra que ha fluctuado levemente en los últimos años. Por otro lado, un 29,0% de las personas encuestadas no puede sustituir muebles estropeados o viejos.
La capacidad para renovar la ropa también presenta dificultades, con un 7,6% de la población que no puede permitirse sustituir prendas desgastadas por otras nuevas. Además, un 3,6% no puede permitirse adquirir dos pares de zapatos, lo que indica limitaciones en el acceso a bienes básicos.
La socialización y la participación en actividades recreativas también se han visto afectadas por las dificultades económicas. Un 9,6% de la población no puede reunirse con amigos o familiares al menos una vez al mes, y un 14,0% no puede participar regularmente en actividades de ocio, como deportes, cine o conciertos.
Finalmente, el informe destaca que más de la mitad de la población (51,8%) experimenta dificultades para llegar a fin de mes, lo que representa un aumento de 1,9 puntos respecto al año anterior. Este incremento se ha observado principalmente entre quienes padecen problemas con menor intensidad: en 2023, más personas reportan cierta dificultad (aumento de 1,3 puntos) y dificultad (aumento de 1,6 puntos), mientras que el porcentaje de quienes sufren mucha dificultad ha disminuido en 1,4 puntos.