Ni el frío ni la lluvia pudieron el pasado domingo de piñata con la ilusión de los más pequeños por lucir máscaras y disfraces por las calles de su ciudad, acompañados eso sí por una entusiasta charanga que los guió hasta la carpa carnavalera donde la diversión continuó.
El domingo amanecía con la resaca de un gran sábado de celebración y con unas nubes que amenazaban la diversión de los más pequeños. Según transcurría el día, no estaba claro si saldría el sol, persistirían las nubes o se abriría paso la lluvia. Unas discretas gotas se escaparon. Fue entonces cuando el Ayuntamiento y la Comisión de Festejos decidieron tomar cartas en el asunto. Con motivo de las previsiones meteorológicas, el desfile programado para las cinco se retrasó hasta una hora más tarde, partiendo desde la Plaza 1 de mayo. El motivo del cambio de ubicación lo justificaban los organizadores diciendo que «era para aligerar el desfile debido a la climatología». Estaba prevista también la posibilidad de que lloviera durante todo el desfile, en cuyo caso, la fiesta se hubiese celebrado directamente en la carpa suprimiendo el desfile.
Afortunadamente, no fue así y los más jóvenes pudieron pasearse en el tradicional desfile del domingo de piñata. Superhéroes, villanos, magos y animales se lucieron bajo un cielo gris. En todo momento acompañados por el ritmo y las notas de Los Porompomperos y El Copón Sostenido, dos de las charangas taranconeras. Incluso alguno de los miembros quiso participar y unirse a la tradición de disfrazarse para este desfile.
A pesar del frío y de las previsiones de lluvia, los taranconeros no quisieron perderse el tradicional desfile infantil - Foto: C.F.TFamilias enteras, amigos, compañeros de clase... todos tiñeron las calles de colores hasta la llegada a la carpa instalada en el Parque Ferial. Esta novedad de este año resultó muy bien avenida. Los hinchables y juegos que estaban dispuestos para los niños tuvieron que cambiarse de ubicación e instalarse dentro de la carpa. Esta decisión fue tomada en vista de las bajas temperaturas. Todo un acierto que fomentó la participación de los pequeños que disfrutaron de una tarde de juegos y diversión.
Para reponer energía después de tanto andar y jugar, el Ayuntamiento, junto con la Comisión de Festejos, proporcionó a todos los niños que fueron disfrazados una merienda muy taranconera. El festín consistió en un borracho y un batido que conquistó a los más golosos. Pensando en todos, también hubo opciones para niños con alergias e intolerancias. Una vez repuestas las fuerzas, los niños tuvieron toda una tarde de música y juegos a buen resguardo dentro de la carpa del Ferial.
Continuando con la programación prevista para esta semana de Carnaval, esta mañana tendrá lugar el desfile de máscaras en el que participarán los centros educativos de la ciudad. Iniciándose en la rotonda de Obras Públicas y terminando también en la carpa. Una vez allí, ésta quedará cerrada solo para los alumnos y el profesorado que les acompañe de los centros para continuar con la fiesta.