Fernando Jáuregui

TRIBUNA LIBRE

Fernando Jáuregui

Escritor y periodista. Analista político


2023: resumen en veintitrés palabras, con 'P' de 'puñetero'

31/12/2023

¿Cómo hacer un compendio, en los estrechos límites de este comentario, sobre lo ocurrido en 2023, el año que volvió a cambiar España y un poco el mundo?. El Cambio, no solo político, nos ha trascendido, imposible aprehenderlo todo. Así que, a falta de idea mejor, le voy a hacer, amable lector, una propuesta: voy a ofrecerle, como mi resumen de 2023, veintitrés palabras que comienzan por P, que para mí ha sido la letra del año, seguidas de un mínimo comentario personal, abreviado al máximo. A usted, querido amigo, le corresponderá, y le pido perdón por incitarle a ello, completar la reflexión. Y no, no es un juego. Porque en este año para olvidar han ocurrido cosas muy serias sobre las que debemos meditar para evitar que se repitan.

Año de Puigdemont (ruptura con el sentido común y con la lógica imperante), de polarización (el término elegido por la Real Academia para resumir una situación de caos y desentendimiento en la política, que yo llamaría más bien antipolítica, y mire, si no, lo ocurrido en Pamplona). Año de Pedro (y del PSOE, sí, ganadores contra pronóstico en la loca carrera por el Poder). Año, si usted quiere, del PP (perdedor sin haber perdido). Año de Presidencia de la UE (¿ha salido bien, mal, regular? Usted mismo), de Putin (personaje que hace peor el mundo), de populismos (haga usted mismo la lista), de Palestina (ay). Año de promesas (no solamente electorales; no todas, pero sí muchas, incumplidas), más de propagandas que de realidades, más de ocurrencias que de verdadero pensamiento.

Año sin pasado (se consumó el estallido del 'espíritu del 78'), sin pudor (el desafío a las hemerotecas, la ocupación de las instituciones), sin verdaderos pactos de país.

En fin, un año verdaderamente puñetero. Menos mal que también ha sido el año de la Princesa ('leonormanía' es un término que, al menos, evoca un porvenir). Y que tendremos a Pedroche para alegrarnos, con las campanadas a medianoche, el paso a otro año que, glub, puede ser de aúpa. Mañana haremos previsiones para 'el veinticuatro'. Y felicitaciones, claro.