El honor es el patrimonio del alma y no existe honra más grande que reconocer aquello que hace diferente, lo que es propio y que marca la tradición e identidad de un lugar. En el año 2000, ese honor se hizo oficial en San Clemente cuando acordaron en el Pleno municipal otorgar el reconocimiento de alcaldesa perpetua y honoraria a la Virgen de Rus. Este título es de única concurrencia por lo que nadie más puede ser distinguido con él, lo que representa la devoción sanclementina por su historia y su patrimonio, así como por la imagen mariana.

Y es que la Virgen de Rus es mucho más que una talla, es símbolo de la fe inquebrantable que se ha transmitido no solo en el pueblo, sino en todo el campo de Rus. Es una tradición ancestral que se ha legado de padres a hijos como el testigo de que aunque el tiempo pase, el sentir común y la historia permanecen.

Como testigo del reconocimiento, desde que se le otorgaron los honores la Virgen, comenzó a lucir las distinciones propias de su cargo: la vara de alcaldesa que representa la justicia, el orden y la autoridad en el municipio y la medalla con el escudo de armas de la villa, símbolo acreditativo de la condición de alcaldesa que, desde entonces, la imagen luce en su pecho en todos los actos. El remate para aquel año 2000 vino dado por la declaración de las fiestas patronales como fiestas de Interés Turístico Regional por la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.

Veinticinco años después de tal efeméride, San Clemente abre sus puertas a vecinos y visitantes para celebrar la efeméride y conmemorar el año de la tradición con la reaprobación del nombramiento de la Virgen de Rus como alcaldesa perpetua y honoraria del pueblo. 

Con motivo de esta conmemoración y a la efeméride de las fiestas patronales, se celebrará un encuentro de las vírgenes de la provincia, con extensión a la comarca, que también sean alcaldesas honoríficas de sus respectivos lugares de origen. Este encuentro, por el momento, se estima que reúna en torno a una decena de imágenes que acompañarán en procesión extraordinaria a la Virgen de Rus. El Consistorio anima en este año de celebración a todos aquellos que lo deseen a descubrir sus festividades, en las que los colores, los pasodobles, el baile y los pañuelos ornamentados forman un conjunto que da lugar a una procesión única que hay que ver al menos una vez en la vida.