Regalar un libro es quizá el mayor acto de disrupción en un mundo anestesiado, un mundo en el que el hermano mayor de George Orwell es una realidad asumida. Encender la luz en las mentes es algo que la literatura lleva años cumpliendo, despertando conciencia y allanando el camino hacia la justicia y la utopía del futuro soñado. Los libros son uno de los pocos regalos que pueden cambiar una vida y que pueden procurar que su mensaje y sus palabras queden escritas a fuego en el corazón. Cuenca es cuna de literatos, de creadores de historias por cuyas venas fluye tinta, como Julia de la Fuente y Juan Soria.
Julia es una joven autora que cosecha un gran éxito con sus novelas traducidas a cuatro idiomas. Seleccionada por la Organización Española para la Literatura Infantil y Juvenil como uno de los mejores títulos publicados en 2023 en nuestro país por La canción del fiordo, y que ahora, gracias a sus 10 años en el mundo editorial, apoya a otros escritores para que puedan alcanzar su sueño. De la Fuente, una autora «local internacional», insiste en la importancia de apostar por la literatura de proximidad porque «es apostar por las personas que te rodean», además de que pueda encontrarse algún que otro guiño en sus novelas al lugar que les vio crecer.
Soria es un veterano en el mundo editorial, con una enorme producción literaria de 19 títulos publicados, que comenzó a escribir en la madurez por su pasión por las letras. Para este conquense, los autores locales tienen que trabajar muy bien desde el proceso de escritura hasta el momento de publicarse o autopublicarse, estando presentes prácticamente desde la idea hasta que el libro sale impreso.
Soñar entre letras - Foto: Reyes MartínezEl libro es uno de los regalos estrella de las navidades y en Cuenca las librerías locales, junto a las instituciones que les permiten tener un espacio, son el gran apoyo que ambos autores destacan. De la Fuente insiste en el valor de comprar literatura de proximidad porque asegura que «a los autores locales siempre se nos puede encontrar para que dediquemos el libro, que creo que lo hace más especial». Además, cuenta con web propia donde vende su producción literaria en competencia directa con las grandes plataformas, apostando por «mimar mucho los envíos».
Canales de venta. En esta web ha sido donde ha lanzado unas cajas temáticas de sus novelas en las que además del volumen, pueden encontrarse pequeños detalles relacionados con éste que ella misma selecciona y prepara. Soria, por su parte, también recalca al valor de los espacios locales y señala el trabajo encomiable que el personal de las bibliotecas, no solo de Cuenca capital sino de toda la provincia, realiza. Juan Soria comenta un fenómeno que se ha encontrado en su trayectoria al presentar su trabajo. Señala a un «provincialismo en el buen sentido de la palabra» porque «cada vez que he ido a un pueblo a presentar una de mis novelas me he encontrado el pueblo empapelado y muchísima gente esperando con la novela en la mano», un símbolo de que en Cuenca se apuesta por el talento local.
La respuesta de la gente más cercana es algo que De la Fuente destaca señalando que desde sus inicios ha sentido el cariño del público y una gran respuesta a su trabajo. Todo ello tanto a través de las redes sociales como en los encuentros presenciales.
Cuenca tiene una enorme biblioteca de talento local en cuyas estanterías hay géneros, extensión y trabajos para todos los gustos. Apostar por los autores cercanos no solo es una muestra de apoyo y cariño hacia los vecinos que se lanzan a soñar entre letras, sino también es permitir que sean los propios conquenses quienes allanen el abrupto terreno del mundo literario para las futuras generaciones de autores locales.