Un partido atractivo y emocionante tanto por la magnitud del rival como por el estadio en el que se va a disputar. Y es que la Balompédica visita este domingo (17,30 horas) la Ciudad Deportiva del Real Madrid para medirse ante el segundo de sus filiales. Es un choque liguero que «ilusiona» y que los jugadores afrontan con «la convicción de hacer un gran encuentro para poder ganar», tal y como explica el técnico, Rober Gutiérrez.
El Conquense, décimo en la tabla, acumula seis jornadas sin conocer el triunfo, con cuatro derrotas y dos empates en estas citas. Bien es cierto que la dinámica es más optimista en las últimas jornadas y es hora de «refrendar las buenas sensaciones». Mucho más después de «contar con una semana para recuperar bien a los futbolistas». Rober Gutiérrez incide en que «la portería a cero tiene que volver a ser nuestra senda», siendo conscientes de que «tenemos que mejorar en las acciones defensivas a balón parado, porque nos están costando muchos goles».
El Real Madrid C, decimocuarto clasificado, es un «filial potente con jugadores técnicamente muy bien dotados que no creo que pase mucho tiempo para verles en el fútbol profesional». Para intentar ganar en Valdebebas «tenemos que saber cuáles son sus puntos débiles y tratar de hacerles daño». El duelo de este domingo y el de la semana que viene en casa ante el Sur Yaiza son «muy importantes y tenemos que sumar los seis puntos» para remontar el vuelo.
Alcanzada la decimoquinta jornada liguera, Rober Gutiérrez explica que «tenemos un déficit de puntos importantes». De hecho, «contaba con tener alguno más», precisamente por haber «tenido varios partidos donde no hemos competido y estado a la altura de la competición». Sin embargo, el entrenador almeriense incide en que «el equipo no ha pasado a la zona de descenso aún y eso quiere decir que algo habremos hecho bien antes».
La buena noticia es que estará disponible Jairo Cárcaba tras superar sus molestias. Es «gloria para nosotros». Sin embargo, Etxebe y Kain no estarán aún e incluso ya se espera que vuelvan en enero, porque «no vamos a asumir ningún tipo de riesgo». El objetivo es que «se recuperen bien» y que estén disponibles después de las vacaciones navideñas, ya que ambos «nos van a venir como agua de mayo», recalca.
Confianza. Rober no siente que se encuentre en la cuerda floja, sino todo lo contrario. De hecho, él mismo apunta que «la directiva me ha transmitido máxima confianza». No teme «nada» por su puesto e incluso recuerda que si supiera que el problema fuera él, «tendría bien claro que me marcharía». Ahora mismo, «hay que estar tranquilos».