La historia casi se repite y los hoteles de la capital conquense vuelven a comenzar el año de una manera bastante discreta, incluso, por debajo de ejercicios anteriores, tanto en viajeros como en pernoctaciones.
La Encuesta de Ocupación Hotelera (EOH) del Instituto Nacional de Estadística (INE) sitúa a estos alojamientos a niveles de hace una década, cuando los viajeros rondaban los 8.000 y las pernoctaciones se movían en el entorno de las 15.000 y 16.000.
Y es que los hoteles de la capital han despedido el primer mes de este 2024 con 8.354 clientes, 854 menos que hace justo un año, cuando se superaron los 9.200, lo que supone una caída del 9,3%. Pero, por si eso fuera poco, este enero se ha situado un 24,5% por debajo de prepandemia, ya que en 2019 se alcanzaron los 11.063 clientes.
Los madrileños son casi la tercera parte de los viajeros que se hospedan en hoteles de la capital. - Foto: Elaboración propiaEl 15,7 por ciento más de viajeros extranjeros que se han hospedado en un hotel de la capital en este periodo no ha sido suficiente para paliar el descenso de casi un millar de turistas nacionales.
Las pernoctaciones, por su parte, han ido por los mismos derroteros, aunque, eso sí, el ligerísimo incremento de la estancia media ha permitido que esa caída no haya sido tan pronunciada como en el caso de los viajeros.
En concreto, se han elevado a 16.201, un 4,6 por ciento menos que en enero de 2023, cuando casi se alcanzaron las 17.000, aunque se han quedado un 18,9% por debajo de los niveles de prepandemia, cuando las pernoctaciones en los hoteles de la capital se acercaron a las 20.000.
Los hoteles inician el año con números de hace una década - Foto: Reyes MartínezEl sector hotelero reconoce que en los últimos años enero no es, precisamente, un buen mes, si bien confía en que, en esta ocasión, haya sido más bien «algo coyuntural», tal y como manifiesta a La Tribuna el presidente de la Agrupación Provincial de Hostelería y Turismo (APHT), José Manuel Abascal, quien considera que «hay margen de mejora», por lo que se muestra convencido de que «si se hacen cosas, se pueden subir estos números muy fácilmente».
Es por ello que insiste en reclamar la necesidad de una oficina que se dedique a programar eventos de todo tipo e índole todos los meses del año con el fin de reforzar el atractivo de Cuenca como destino turístico, al tiempo que se genera actividad y dinamismo.
Otras cifras. La única nota positiva la ha puesto la estancia media. No en vano, según el informe del INE, ésta se ha situado en los 1,94 días, por encima no sólo de los 1,84 del pasado ejercicio, sino también de los 1,80 de antes de la pandemia, en 2019.
No ha ocurrido lo mismo con la ocupación hotelera y, como es de esperar, el menor número de viajeros y pernoctaciones se ha traducido en una disminución del grado de ocupación de estos alojamientos hasta una media del 30,6%, un punto y medio menos que hace un año (32%)y casi tres por debajo del 33,3% de 2019.
Diferencias que prácticamente desaparecen si se habla del fin de semana, puesto que han cerrado enero con un 44,3% de ocupación media, ligerísimamente inferior al 44,9% de 2023, pero, eso sí, bastante por debajo del 52,9% de hace cinco años.
A pesar de estos números, la rentabilidad de estos establecimientos no se ha resentido en exceso y el ingreso medio por habitación disponible –el indicador conocido como RevPAR– se ha situado en los 25,14 euros, un 0,9% menos que a principios de 2023, cuando se llegó a los 25,37, y un 0,7% por debajo de los 25,31 estimados en 2022.
El ingreso medio por habitación ocupada (ADR), por su parte, también viene a confirmar ese cierto mantenimiento de la rentabilidad, aunque, en este caso, el descenso es mayor; en concreto, del 3,3 por ciento, al pasar de los 64,84 euros de enero de 2023 a los actuales 62,70.
La procedencia de los viajeros, por su parte, no varía mucho en relación al resto del año, de tal manera que los madrileños son los que más visitan y se hospedan en la capital, con el 28,4% del total, seguidos de los castellanomanchegos, con el 19,4%, y los valencianos, con el 17,1%. No en vano, estos turistas aglutinan dos tercios del total de visitantes.
Provincia. Los hoteles de la provincia, por su parte, no han corrido mejor suerte y en enero han registrado una caída en viajeros del 5,7%, hasta los 14.509, y en estancias del 1,3%, al quedarse en las 27.195. Y eso a pesar del mayor número de visitantes extranjeros registrados, un 14,3 por ciento más, que no ha sido suficiente para contrarrestar el mayor descenso de los clientes nacionales.
La estancia media, al igual que en la capital, también ha sido la nota positiva de enero. Y es que los turistas se han hospedado en los hoteles conquenses una media de 1,93 días, por encima de los 1,85 del año anterior y de los 1,74 de hace cinco.
El grado de ocupación de estos establecimientos, por ultimo, parece haber aguantado el tipo y se ha situado en una media del 21,5% de las plazas, casi igual que en 2023 (21,9%) y muy por encima del 19,9% de 2019. Situación que prácticamente se repite los fines de semana, cuando la ocupación ha crecido al 27%, ligeramente inferior al 27,9 de 2023 y dos puntos y medio por debajo del 29,4% de 2019.