Que la feria transcurra con normalidad y sin tener que lamentar incidencias. Primar la tranquilidad y, por supuesto, la seguridad por encima de todo. Estos son los deseos y propósitos que plantearon de forma conjunta el Ayuntamiento y Cruz Roja Cuenca para estos días festivos en la ciudad. Es una alianza que se traduce en una labor de campo encomiable de muchas horas con el fin de que todo salga a las mil maravillas.
Tanto el Consistorio como la organización humanitaria trazaron una hoja de ruta para que en la Feria y Fiestas de San Julián se ofrecieran dos servicios de referencia, así como de actuación en el caso de que fuera necesario, como son el Punto Violeta y el Punto de Atención a la Infancia. El primero estuvo enfocado para la prevención, ofreciendo ayuda, sensibilización y atención sobre violencia machista, también para la atención e intervención a las víctimas ante posibles agresiones sexistas. Mientras que el segundo se centró en ofrecer un sistema sencillo pero muy eficaz para resolver de forma rápida la búsqueda de cualquier menor desaparecido en el Ferial, por medio de una pulsera informativa con el teléfono de contacto del adulto.
La concejala de Servicios Sociales e Igualdad, Estela Soliva, recalcó la «importancia de colaborar con organizaciones como Cruz Roja Cuenca, que ha desarrollado un papel muy importante durante las fiestas». En primer lugar, con las pulseras del Punto de Atención a la Infancia, que «por segundo año consecutivo ha tenido una acogida increíble». En concreto, Estela apunta que «el año pasado fue éxito y este año hemos repetido, como así haremos el año que viene». Entre otras cosas, «porque concede tranquilidad y seguridad tanto a los pequeños como a los adultos, debido a la aglomeración del propio Ferial». Cuando un menor puede extraviarse ante tanta multitud, «es más fácil encontrarlo porque cualquier persona puede llamar al teléfono que tiene inscrito en la pulsera». El balance es que se han colocado más de un millar de pulseras en estas fiestas. Por otro lado, la concejal de Servicios Sociales e Igualdad expresó que, «por desgracia, tenemos que utilizar el Punto Violeta por posibles necesidades de actuación, pero también para concienciar y sensibilizar». Este punto «se situó en los espacios más masificados, instalándose junto a la Carpa Joven o en La Fuensanta durante la celebración de los conciertos». Esta mesa de actuación «está compuesta por profesionales, contando con un equipo muy preparado». En este aspecto, por suerte, todas las actuaciones que se han acometido son de sensibilización.
Estela apunta, además, que el principal propósito de estos dos puntos es «tener unas fiestas seguras y tranquilas» y resaltó su «felicidad por ver que funcionan a la perfección». Eso hace que «esté muy agradecida a la labor que ha llevado a cabo Cruz Roja Cuenca con todos sus voluntarios y profesionales implicados».
De esta forma, la Feria y Fiestas de San Julián son más seguras para todos. Que así sea, se debe también es al civismo que reina durante las fiestas, con conquenses y visitantes concienciados en disfrutar con el respeto por bandera.