El ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, ha afirmado este lunes que la ofensiva contra la Franja de Gaza continuará hasta "desmantelar" las "capacidades militares" del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) y lograr la liberación de "todos" los secuestrados durante los ataques ejecutados el 7 de octubre contra territorio israelí.
"Es una guerra en la que no hay elección, una guerra que perfilará nuestras vidas durante las próximas décadas", ha dicho Gallant, quien ha subrayado que el Ejército de Israel continuará sus ataques contra Gaza hasta poner fin al control del enclave por parte del grupo islamista.
Así, ha hecho hincapié en que la ofensiva continuará "hasta devolver la prosperidad y la creatividad al Estado de Israel y la sonrisa a las caras de sus ciudadanos", en el marco de una ceremonia por el Día del Recuerdo -en el que se rinde homenaje a los soldados caídos-, según ha informado el diario The Times of Israel.
El Ejército israelí ha incrementado durante las últimas semanas sus bombardeos contra la ciudad de Rafah, en la frontera con Egipto, llegando a realizar incursiones en la zona -incluida la toma del lado palestino del paso fronterizo-, al tiempo que ha intensificado sus operaciones contra otros puntos del enclave, especialmente en la zona norte de la Franja.
Israel lanzó su ofensiva tras los ataques ejecutados el 7 de octubre, que dejaron cerca de 1.200 muertos y unos 240 secuestrados. La ofensiva deja hasta la fecha más de 35.000 palestinos muertos, a los que se suman más de 480 muertos a manos de las fuerzas de seguridad israelíes o en ataques perpetrados por colonos en Cisjordania y Jerusalén Este.
La ofensiva de Israel se ceba con Yabalia
La ofensiva militar israelí está atacando con intensidad en Yabalia, ciudad del norte de la Franja de Gaza donde las tropas han retomado su actividad ante el retorno de Hamás; y su artillería se extiende por los barrios del centro y este de Rafah, en el extremo sur del enclave, que Israel ordenó evacuar hace dos días.
Los bombardeos aéreos y la artillería están atacando viviendas tanto en el campo de refugiados de Yabalia, como en la ciudad, donde los servicios de ambulancias rescataron al menos veinte cuerpos y atendieron a decenas de heridos.
"Las fuerzas de la ocupación atacan ambulancias atacaron las ambulancias en el campo de Yabalia, donde no pudimos llegar a gran número de víctimas", denunció el director de los servicios de emergencias en el norte de Gaza.
La agencia oficial palestina Wafa, citando testimonios de residentes, indicó que las fuerzas israelíes "rodearon y asaltaron" los centros de refugio, obligando a cientos de personas a desplazarse al oeste de la ciudad.
"Las fuerzas de la ocupación ahora intentan asediar e irrumpir en los seis centros de refugio situados al este del campamento. Hay disparos con drones y francotiradores, obligando a los desplazados a salir sin saber a donde ir", explicó a EFE por teléfono un residente de Yabalia, que no quiso dar su nombre por seguridad.
La misma fuente también informó de fuertes enfrentamientos armados entre las milicias palestinas y las tropas israelíes dentro del campamento, por lo que el Ejército israelí ha tenido que pedir refuerzos.
"Las fuerzas israelíes intentan avanzar hacia en el centro del campo y disparan a todo lo que se mueve a su alrededor, mientras los dones sobrevuelan intensamente la zona a poca altura", explicó.
Unos 360.000 gazatíes abandonan Rafah en una semana
Unas 360.000 personas han huido de Rafah, extremo meridional de la Franja de Gaza fronterizo con Egipto, desde la primera orden de evacuación emitida por el Ejército israelí hace una semana, según las estimaciones de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA).
"Mientras tanto, en el norte de Gaza los bombardeos y otras órdenes de evacuación han creado más desplazamientos y miedo para miles de familias", indicó la UNRWA en su cuenta de X.
Israel ordenó por primera vez la evacuación de los barrios más orientales a las afueras de Rafah hace una semana, donde había unas 100.000 personas, pero el fin de semana amplió la orden de desplazamiento a más áreas del centro de la ciudad y hoy sumó otros dos barrios, ubicados ya en la mitad occidental.
Antes de la evacuación, Rafah acogía desde hacía meses a 1,4 millones de personas, la mayoría desplazados por la violencia de otras zonas de la Franja de Gaza que sufrieron la ofensiva militar israelí.
"La gente no sabe a dónde ir. Todo el mundo en Rafah, incluso en las zonas donde aún no se ha ordenado la evacuación, se está marchando. En la calle, se preguntan los unos a los otros sobre cuál es el mejor lugar para desplazarse", señaló a EFE un gazatí desplazado en el barrio de Tal al Sultan, en el oeste de Rafah.
La fuente, que no quiso dar su nombre, subrayó que en Rafah reinan el "miedo y la confusión", ya que la gente es reacia a desplazarse a lo que Israel ha designado como "zona humanitaria" para ellos, en el área costera de Mawasi, donde viven hacinados cientos de miles de personas en tiendas improvisadas en la playa, sin agua potable ni saneamiento.
"No hay ningún lugar adonde ir. No hay seguridad para moverse sin un alto el fuego", reclamó UNRWA.