La Audiencia de Cuenca juzgará el miércoles, 16 de octubre, al agente de la Guardia Civil, J.A.S.S., que se enfrenta la petición del fiscal de seis años de cárcel por un delito continuado de falsedad documental en documento oficial y un delito leve de estafa, al haber elaborado dos denuncias y un parte de accidente presuntamente fraudulentos.
Los hechos se remontan, según el escrito de acusación de la Fiscalía, a agosto de 2018, cuando el acusado, destinado en Cañete, se dirigió junto a otro agente a una plaza de esta localidad, donde se habían concentrado gran cantidad de personas, oyendo cuando se acercaban que uno de ellas profirió la expresión «cabrones».
Quince minutos después de aquellos hechos, llegaron a la plaza dos hermanos y uno de ellos, al observar el tumulto de gente, comentó «vaya fiesta que tenéis aquí, que tenéis a la Guardia Civil».
Fue entonces cuando el acusado, «en actitud absolutamente chulesca e intimidatoria», según el escrito de la fiscal, se dirigió a los hermanos para pedirles identificación, pero sin levantar acta de denuncia, aunque, al finalizar el servicio, formalizó la denuncia contra estos dos individuos por la supuesta comisión de una falta de respeto y consideración, atribuyéndoles la expresión «cabrones» que habían oído.
Un par de días después, los mismos guardias civiles se cruzaron en la carretera entre Cañete y Salinas del Manzano con el vehículo de uno de los hermanos, circunstancia que el acusado aprovechó para redactar una nueva denuncia «inveraz» por conducción sin cinturón de seguridad, por lo que fue sancionado con una multa de 200 euros.
Otros hechos. En diciembre de 2018, el acusado trató de eludir la responsabilidad de unos daños en su vehículo oficial contactando con el responsable de una empresa de retroexcavadoras para redactar una declaración amistosa de accidente, que «no fue capaz de rechazar», en palabras de la fiscal, por venir de un agente uniformado.
Así, el acusado confeccionó un parte amistoso «absolutamente mendaz» y la aseguradora se hizo cargo de los 304,33 euros de la reparación.
Para la Fiscalía, los hechos constituyen un delito continuado de falsedad documental y otro leve de estafa, por los que pide seis años de prisión, inhabilitación especial de empleo y cargo público durante ese tiempo e indemnizaciones para el hermano denunciado y la aseguradora.