Cruz Roja celebró este sábado un hito significativo: 160 años compromiso humanitario en España. Es una conmemoración que pone en valor el camino recorrido y cómo se ha basado a lo largo de las décadas en el principio de Humanidad que impulsa a la Organización a prevenir y aliviar el sufrimiento humano.
Con motivo de la celebración de los 160 años de Cruz Roja Española, la organización plantaba esta mañana el Árbol de la Humanidad en la Avenida Progreso en Tarancón, frente a su sede. Un acto que, durante esta jornada y hasta que concluya 2024, se repetirá en las sedes de varias ciudades españolas.
A las 10.45 horas el presidente autonómico de Cruz Roja en Castilla-La Mancha, Jesús Esteban, la presidenta provincial de Cruz Roja en Cuenca, María del Carmen Palomares y el presidente local de Cruz Roja en Tarancón, Javier Manzanares, acompañados de la viceconsejera de Servicios y Prestaciones Sociales de la Consejería de Bienestar Social del Gobierno de Castilla-La Mancha, Guadalupe Martín, y de la concejala de Educación, Políticas Inclusivas y Servicios Sociales del Ayuntamiento de Tarancón, concejala de Servicios Sociales, Raquel Benavente, plantaban un almez que ha quedado identificando como el Árbol de la Humanidad de Cruz Roja gracias a una placa conmemorativa.
Cruz Roja planta el Árbol de la HumanidadTal y como ha comentado la presidenta provincial de Cruz Roja en Cuenca, María del Carmen Palomares, "el objetivo de este acto, con la que queremos conmemorar nuestros 160 años de acción humanitaria, es trasladar el compromiso de nuestra organización con un futuro sostenible enraizado en los valores que transmite una acción tan simple pero tan poderosa". Al tiempo que, ha agradecido la colaboración del Ayuntamiento de Tarancón para llevar a cabo esta iniciativa y la presencia de la viceconsejera de Servicios y Prestaciones Sociales, Guadalupe Martín, durante el acto.
La relevante contribución de Cruz Roja en España no solo se mide por los servicios prestados, "sino por la capacidad de adaptarse y evolucionar para abordar los desafíos contemporáneos y futuros. Es una conmemoración idónea para recordar la necesidad de reivindicar constantemente el sentimiento de humanidad compartido. Tenemos la obligación de estar siempre al lado de quienes se ven permanentemente frente a la amenaza de la vulnerabilidad; de acercarnos a quienes luchan a diario por su derecho a no quedarse en los márgenes; de tender la mano en todo momento a quienes se sienten solos; de tener siempre presente que la crisis climática y ambiental es una amenaza a la propia supervivencia de la humanidad. En un día como hoy, recordamos que todas las personas, todas, tienen Derechos Humanos" explica María del Mar Pageo, presidenta de Cruz Roja Española.
Alcanzar estos 160 años de humanidad compartida ha sido posible gracias al "testimonio diario de los millones de personas voluntarias y trabajadoras que nos demuestran que somos en la medida en que somos con los otros. Su discurso es la generosidad que ejercen a diario", continúa la presidenta.