La cuarta edición de la convivencia de Navidad que organiza la asociación Nueva Luz reunió ayer en el Pabellón Peña El Águila a cientos de alumnos que desarrollaron sus papeles bien como jugadores o bien como espectadores. Cuatro horas de fútbol sala con seis equipos divididos en grupos y eliminatorias correspondientes dieron lugar a un torneo emocionante e intenso.
Según explica el trabajador social Raúl Cantarero, «esta cita lleva celebrándose ya varios años, pero en un principio se enfrentaban equipos de usuarios de la asociación contra voluntarios». Sin embargo, esto cambió hace cuatro años, y «se decidió implicar a los centros educativos y es por ello que ahora acuden los alumnos», argumenta.
Ahora los equipos son mucho más inclusivos ya que según explica Cantarero, «los usuarios forman conjuntos mezclados con los estudiantes». La razón es que «así los chavales ven que pueden trabajar con personas con problemas mentales, que pueden ser uno más del equipo», explica al respecto.
Con esta actividad, «Nueva Luz finaliza la última acción en coordinación con los Centros Educativos en 2023, y por eso queremos agradecer a profesores, alumnos implicados y voluntarios la disposición a trabajar de la mano en este tipo de actividades tan beneficiosas para todos», concluye el trabajador social de Nueva Luz.