Las cartas están encima de la mesa. Tan solo queda una jugada y hay que «ganar, ganar o ganar, porque no hay otra solución». Es un auténtica final y el Rebi Cuenca es consciente de ello. El conjunto dirigido por Lidio Jiménez disputa mañana (17 horas) la última jornada liguera ante el Bidasoa Irún con mucho más que dos puntos en juego, porque el club aún tiene que firmar la permanencia en Liga Asobal. Un empate sería suficiente para mantener la categoría, pero si no se cumple con el cometido, el equipo podría caer en esa decimocuarta posición que obligaría a disputar la promoción de descenso.
Lidio Jiménez reconoce que «nos habría gustado llegar a este partido con los deberes hechos», pero no queda otra que «asumirlo». Hay que mirar «el lado positivo de que jugamos en nuestra casa y el pabellón tiene que reventar». Otro de los aspectos positivos es que el Rebi Cuenca «depende de sí mismo», puesto que es el Cangas de Morrazo quien parte con peor perspectiva. Es la hora de rematar la faena y firmar la salvación ante la afición conquense.
El técnico conquense evita pensar en los partidos del resto de clubes implicados en la permanencia e incluso incide en «olvidarnos de todo lo pasado, no hay que mirar para atrás ni para lo bueno ni para lo malo». Lo principal es «mirar al Bidasoa e intentar puntuar». Sea como sea y a toda costa. El conjunto vasco «ha hecho un temporadón» y Lidio Jiménez prepara el choque ante «uno de los equipos más regulares de la campaña» en la pista, aunque sí es cierto que podría levantar el pie del acelerador al no jugarse nada. No obstante, el técnico conquense resalta que «ellos no tienen presión porque ya tienen todo hecho, y eso puede que haga que jueguen incluso mejor porque están liberados».
El cuadro capitalino «estaba jodido en los primeros días tras la derrota de la jornada pasada» en Segovia, pero a medida que los días fueron pasando «vemos la realidad que tenemos la posibilidad de depender de nosotros mismos». A poco más de 24 horas para el partido, tanto cuerpo técnico como jugadores tienen «muchas ganas del partido» y lo afrontan con tranquilidad, dentro de lo que cabe, porque los nervios pueden jugar una mala pasada.
El hecho de jugar en El Sargal debe ser «nuestra alma, espíritu, intensidad y concentración»en un duelo ante el segundo clasificado donde «no podemos regalar nada». Lidio Jiménez subraya que su equipo tiene que «defender muy bien y no regalar absolutamente nada» e insiste en que «tenemos que jugar sencillo». Los jugadores no estarán solos porque se prevé una entrada extraordinaria en El Sargal tras la campaña que ha lanzado el Rebi Cuenca para llenar el pabellón.
daniel neves. Otra de las noticias es el regreso a la convocatoria de Daniel Neves, que ya lleva «varias semanas entrenando con nosotros y está a un gran nivel». El jugador portugués vuelve a estar disponible después de superar una larga lesión que le ha mantenido en el dique seco durante meses. Es una pieza clave que supondrá un salto de calidad en la plantilla.