En las últimas semanas, la iglesia de la Asunción de Tarancón ha llevado a cabo una reforma en el retablo lateral de la Virgen de Fátima, que ha consistido en la colocación de dos nuevas repisas laterales que ahora albergan las imágenes de Santa Marta y San Francisco Javier. La reforma ha permitido reubicar adecuadamente diversas imágenes que anteriormente se encontraban en otros espacios del templo o almacenadas, asegurando su exposición en un lugar «digno y apropiado». De esta manera, la parroquia de la Asunción, declarada Bien de Interés Cultural, reafirma su compromiso con la conservación y honor de su patrimonio artístico.
Félix Montoya, presidente de la Hermandad de la Exaltación de la Cruz, mostró su satisfacción con la remodelación, destacando la importancia de preservar el legado religioso del municipio. «Este tipo de reformas son esenciales para garantizar que las imágenes sagradas estén en un lugar que les rinda el respeto que merecen». Además, Montoya subrayó el valor de iniciativas como ésta, que «no solo protegen el patrimonio material, también fortalecen el vínculo espiritual de los fieles con las imágenes».