Las comisiones de investigación en el Congreso de los Diputados tienen un común denominador : no investigan nada. Son pura pantomima que se cocina a la carta y al gusto de los chef del restaurante, o sea, quienes tienen la mayoría y mandan en la 'mesa'. De hecho los menús que la minoría pide se rechazan sin más contemplaciones y listo
La comisión de 'investigación' que ahora pretende el PSOE, se supone que aparaguado bajo sus socios de los que depende y a los que vive sometido, porque son ya 56 votos, que se dice pronto, los que les faltan para la mayoría, no tiene en absoluto el objetivo de aclarar ni depurar nada sino de enturbiar y encenagarlo todo para que en el revoltijo se camuflen sus cienos. De hecho en 2020, cuando fue requerida y para lo mismo, se negaron y la rechazaron.
Pero ahora en lo que están ellos metidos hasta las trancas es en que a su penosa y mendaz gestión de la pandemia, de la negación contumaz y trágica del inicio, recuerden ustedes que era una 'gripecilla' y que había que salir en masa a manifestarse apiñuscados, el 8-M, a la ocultación de los muertos, seguimos sin saber ni cuantos fueron en total, se ha unido el estallido de una corrupción organizada en la propia entraña del Gobierno. Que utilizó el poder e influencia que esa posición de privilegio les daba y que aprovechó el absoluto descontrol y aceptación  de la averiada y carísima mercancia por parte de otros ministerios y gobiernos autonómicos que simplemente acataron y pagaron porque venían de los 'nuestros' y había que comprarla. Y por todo ello y para salvarse de lo que temen o al menos enturbiarlo, que es la acción de la Justicia, montan el teatrillo y sale la señora Armengol, presidente de la Cámara proclamandose 'indignadisima' y exigiendo responsabilidades, siendo ella como es el más evidente ejemplo de la desvergüenza que puede ponerse, pues sería ella la primera que habría de comparecer y rendir cuentas. Y que es muy probable que haya de rendirlas, pero ante quien de veras deberá al cabo hacerlo, por muchos sacos terreros que ponga por delante, ante la Justicia y ante los jueces. Y no ante compañeros de partido, aliados de gobierno y socios comprados de legislatura y amnistiajes delictivos.
Pues resulta que la señora, 'ejemplar' también en sus comportamientos, que declaraba haberse 'dejado  la piel' combatiendo la pandemia fue sorprendida por la policía local de Palma de Mallorca las 02,10 de la madrugada en un bar de copas saltándose todas las restricciones, tiene mucho peso en la mochila y mucho más grave que aquello. Lo que ahora se destapa es que, y tras un simple contacto 'verbal', el contrato eso ya si eso luego, y por venir de los 'suyos', el ministerio del todopoderoso Ábalos y mandamás del partido, compró y pagó a escape 3,7 millones de euros, por una mercancía que de inmediato se vio que no servia y que ademas tenía infladísimo el precio. Lo supo y está documentado, casi de inmediato, en el año 2020, pero no solo no hizo nada sino que lo ocultó, le cargó el costo a los Fondos Europeos, habrá ahora de responder por ello, ya está abierta la investigación y esta de veras, y no hubiera dicho ni mu de no haber perdido las elecciones y el poder en Baleares. Fue justo el día antes de que la 'popular' Marga Prohens tomara el poder cuando, para cubrirse, hizo el papel, mejor dicho el papelón de reclamar la devolución y no toda, de los que no había reclamado en tres años. Eso sí, 'indignadísima'.
 Como indignadísimo también, todos los socialistas salpicados y participes en el asunto exhiben indignación a raudales como blanqueo mayor de fachada, ha salido otro en situación casi idéntica a la suya, el actual ministro de Administración Territorial, Angel Victor Torres, entonces presidente de Canarias que soltó sin comprobar siquiera que era lo que compraba ni lo que costaba, mas de 12 millones, entre todos los contratos. Se añade a la lista, no podía faltar en ella, el ahora líder del PSC, Salvador Illa, entonces ministro de Sanidad para más INRI, que incluyó a la empresa de Koldo&Cia, aunque no tenía ni referencia ni previa actuación en el sector, en el reparto y se suma a la parva, el ministro de Interior, Marlaska, que asimismo entro en el ajo y compró sin preguntar siquiera porque venía de quien venía. De los directivos de los organismos dependientes del Ministerio comandado por Ábalos del que Koldo era sombra y mano ejecutora, ni que decir tiene que a la sola llamada, obedecieran sin rechistar, compraran y pagaran con diligencia y hasta por adelantado. Total, era dinero público, «que no es de nadie», que dijo aquella. Olvidándose que de donde sale es de los impuestos con que nos saquean a todos.
Lo hacían porque venía de los «suyos» y lo decían sus «jefes». Y esa es la verdadera almendra y la causa de la corrupción de todos, de la que viene implícita, sistémica e implícita e insertada en esta forma de hacer política que ha llevado al extremo el Sanchismo. 
  La comisión con la que pretenden colarnos su sainete en el teatrillo del  Congreso no es otra cosa que una pantomima y como tal habría que tratarla. Pero ya se encargaran las ruidosas y abrumadoras claqués de su prensa papagaya de intentar hacérnosla pasar por un Auto Sacramental y hacer salir a bendecidos por los hisopos de su propia cofradía a quienes lo mas probable es que les espere la verdadera investigación y hasta el banquillo. Pero eso irá por otro lado, por el de quien  debe y sabe hacerlo, la Justicia y los jueces. Esta previa no es otra cosa que un intento de expandir humo y basura ajenas, intentando con ello camuflar la porquería propia. Que es ahora de lo que se trata.