El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural del Gobierno de Castilla-La Mancha, Julián Martínez Lizán, ha avanzado su deseo de que, tras los trabajos ya realizados, una Interprofesional del Vino de la región pueda echar a andar en la próxima temporada, toda vez que todos los actores se han citado al final de esta vendimia para seguir avanzando este camino.

En una entrevista con Europa Press, recuerda que ya en el mes de junio se mantuvo la primera reunión con la interprofesión, donde "se plasmó la inquietud de crear esta nueva figura", que en todo caso "sería compatible con la nacional y no habría una competencia entre las funciones que una y otra pudieran realizar".

En esa cita de junio se acordó que una vez acabase la vendimia se reeditaría la reunión "para ir perfilando cuestiones concretas de los estatutos", que ya están en poder de "cada uno de los participantes y en el Comité Regional Vitícola", que han hecho sus aportaciones.

La hoja de ruta pasa ahora por "hacer grupos concretos" ya que la intención es no solo hablar de lo que afecta al vino, sino al resto de producciones derivadas de la uva, desde mostos a vinagres pasando por otros alcoholes.

"Hay cada vez un abanico mayor de posibilidades comerciales que ofrece la uva a nuestros viticultores, y en este sentido creo que tenemos que hacer una gestión importante", ha señalado.

Por tanto, al finalizar la vendimia se retomarán los contactos "para seguir avanzando" y teniendo muy claro que "el sector tendrá lo que quiera el sector", ya que la Administración regional "no va a imponer nada", porque restaría éxito a la operación.

Así, se intentará desde la Consejería buscar "el máximo de acuerdos y que se vean refrendados para llevar el mejor camino posible en la defensa de los productos" castellanomanchegos.

En cuanto al horizonte temporal, confía en que la creación de la Interprofesional "no pase de la campaña que viene"; si bien es algo que depende "del acuerdo y del consenso"

Pistacho, hongos, setas y lentejas

Más allá del vino, ha avanzado que su departamento ya trabaja para engrosar la actual lista de 40 productos agroalimentarios protegidos en la región por su calidad diferenciada con otros tres ejemplos gastronómicos, como son el pistacho, los hongos y setas de La Manchuela y las lentejas.

Resalta en este punto la marca de calidad Campo y Alma, "una apuesta importante del año 2019 que se creó para refrendar y apoyar la promoción y la comercialización" de las 40 figuras de calidad de la región, cómputo al que recientemente se han incorporado otros tres sellos.

Un camino para el que también se abre la puerta a las almendras, que están en pleno proceso de recabar información para sumar méritos que desemboquen en sello propio.

De este modo, el Gobierno regional quiere seguir ensanchando Campo y Alma para "dar visualización a los productos y a su calidad", y para ello se mantendrán estrategias a futuro como la de desembarcar en la Gran Vía madrileña en jornadas de degustación, una iniciativa que además irá a parar "a otras ciudades de España".