El Centro de Educación para Personas Adultas (CEPA) Altomira de la localidad encara un nuevo curso bajo las «buenas sensaciones» obtenidas durante los años posteriores a la pandemia. Una vez finalizado el plazo extraordinario de matriculación y en puertas del mes de octubre, desde el centro hacen un llamamiento para que los distintos vecinos de Tarancón y pueblos aledaños se animen a inscribirse a este nuevo curso que confían «mantenga la tendencia ascendente»de estudiantes tras el «empuje» que aseguran sentir siempre una vez finalizado el mes de septiembre.

«Por lo general es ahora cuando tenemos un aluvión de recepciones, la gente en marzo no sabe qué estará haciendo para el último tramo del año», indica el director del centro, Manuel Benítez, al mismo tiempo que apunta que, una vez finalizados los plazos y ante la disponibilidad de plazas, la oferta sigue abierta.

Durante el curso pasado, el centro dedicado a la formación en edad adulta llegó a superar los 760 alumnos tras la apuesta que realizan año tras año para innovar en su formación. «Empezamos a bajar en usuarios desde 2012 pero la pandemia supuso un punto de inflexión», señala Benítez haciendo alusión al aumento de conciencia sobre formaciones específicas. 

Novedades. A la espera de una confirmación oficial a mediados de octubre, desde el centro adelantan algunas novedades que quieren introducir este año como el curso de lavandería para el mes de noviembre. De la misma forma, solicitaron la opción de poder impartir la cualificación profesional de nivel dos en repostería de cara a enero del próximo año. 

«Nos movemos siguiendo la tendencia que tiene nuestro municipio para cubrir las demanda del momento», señala el director ante el auge de este tipo de negocios en la localidad, como muestra del carácter vanguardista del centro para consolidar la formación entre las personas adultas de la ciudad.