El incendio forestal de Valverdejo, el más grave registrado este año en Castilla-La Mancha, ha cumplido una semana desde que se declaró y sigue activo a la espera de su completa extinción, tras haber quemado más de 2.500 hectáreas y afectar a cinco términos municipales. La alcaldesa de Valverdejo, Vanessa Elvira, ha explicado a EFE que los vecinos del pueblo están "desolados" porque una de las áreas más afectadas por el incendio que se detectó el martes de la pasada semana ha sido el monte público de propiedad municipal. "A todos los vecinos nos gusta pasear por allí, entre los pinos, y ahora verlo todo quemado es desolador", ha lamentado la regidora.
Pese a ello, en el pueblo tratan de recuperar la normalidad, con la reapertura de la piscina y a la espera de que la extinción total del incendio les permita hacer una evaluación más concreta de los daños. En este sentido, Elvira ha comentado que hay algunas parcelas particulares afectadas por las llamas, pero sus propietarios no pueden transitar por la zona hasta que el fuego se dé por apagado de forma definitiva por el plan de incendios forestales de Castilla-La Mancha (Infocam).
Tampoco han conocido ninguna novedad sobre las causas del incendio, mientras prosiguen las investigaciones, y al respecto, la alcaldesa de Valverdejo ha recordado que tras el fuego que arrasó más de 2.800 hectáreas hace cinco años en la zona también tardaron bastante tiempo hasta que los investigadores dieron a conocer las causas.
Y es que el incendio de Valverdejo ha afectado también a los términos municipales de Barchín del Hoyo, Piqueras del Castillo, Gabaldón o Las Valeras, que en su mayor parte resultaron también afectados por el fuego de hace cinco años. En la extinción del incendio de Valverdejo participan este martes tres personas y un medio terrestre, pero durante la última semana han sido más de 700 efectivos del Infocam y un total de 144 medios, de los que 25 eran aéreos los que han trabajado en la zona.
También se sumaron aviones anfibios FOCA del Ministerio para la Transición Ecológica, las Brigadas de Refuerzo contra Incendios Forestales (BRIF) de Soria y de la propia Cuenca, así como la Unidad Militar de Emergencias (UME), entre otros medios.