De «positivo» califica el concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Cuenca, Alberto Castellano, el balance de la actividad del punto limpio durante el pasado ejercicio 2023. 

Y no es para menos si se tiene en cuenta que este servicio municipal ha recogido un total de 680.849 kilos de residuos, entre restos de poda, escombros, chatarra, colchones, muebles, electrodomésticos, pinturas, aceites, tubos, aparatos eléctricos, tóner, pilas, baterías, etc., 102.000 kilos más que en 2022, lo que supone un incremento del 17,6 por ciento, a lo que hay que sumar los enseres llevados hasta las mismas instalaciones, ubicadas junto al centro comercial El Mirador, por cerca de 3.900 ciudadanos, según los datos facilitados a La Tribuna por el Consistorio capitalino.

Cifras que, a juicio de Castellano, ponen de manifiesto que «la sociedad conquense cada vez está más concienciada de la importancia de la recogida de este tipo de residuos para su correcto tratamiento».

Noviembre registró el mayor volumen residuos recogidos por el punto limpio. - Foto: Elaboración propia

En este sentido, el edil llama la atención sobre el mayor uso experimentado por el punto limpio móvil, un servicio que, de lunes a viernes y de 8,00 a 15,00 horas, permite a los ciudadanos deshacerse  con una llamada telefónica al 969 14 01 57 de aquellos enseres voluminosos sin necesidad de  tener que llevarlos hasta el punto limpio.

Es por ello que apela a la responsabilidad ciudadana para que no se depositen este tipo de enseres voluminosos junto a los contenedores de basura, porque «no es la forma ni el sitio», sobre todo existiendo un servicio móvil que facilita la gestión de estos residuos.

Al detalle. De las cerca de 691 toneladas recogidas por el punto limpio durante 2023, la mayoría, cuatro de cada diez (275.590 kg), corresponden a escombros, y el 38,5 por ciento a restos de poda (261.880 kg), es decir, prácticamente ocho de cada diez toneladas son residuos de este tipo.

Balance positivo del 2023 por el concejal de Medio Ambiente, Alberto Castellano. - Foto: Elaboración propia

No obstante, también destacan, aunque en mucho menor medida, los aparatos eléctricos (RAEE), que el pasado año se elevaron a cerca de 91 toneladas; seguidos de la chatarra, con casi 34, y los residuos voluminosos, como muebles, colchones, etc, que superaron las 8,1 t.

Precisamente, estos residuos son los que están detrás del aumento del 17,6% del volumen de desechos recogidos por el punto limpio de la capital. Y es que se gestionaron casi 61.000 kilos más de restos de poda, cerca de 20.000 más de escombros y en torno a 17.000 más de aparatos eléctricos.

Sin embargo, en términos relativos, los restos voluminosos son el residuo que más se incrementó durante el pasado ejercicio, con un aumento del 160%, al pasar de los 3.120 kilos del 2022 a los actuales 8.140.

Y, en esta línea, les han seguido el aceite mineral, con una subida del 123%, tras pasar de 1.214 a 2.707 kg, y las pinturas, con un crecimiento del 40,7%, al alcanzar los