La tendencia alcista de los últimos años de las infracciones de tráfico en la provincia de Cuenca no cesa y en este recién finalizado 2023 no sólo se mantiene, sino que, incluso, incrementa su ritmo de crecimiento.

Las cifras facilitadas a La Tribuna por la Jefatura Provincial de Tráfico de Cuenca apuntan que durante el pasado ejercicio se han incoado un total de 67.644 expedientes sancionadores, nada más y nada menos que casi 23.000 más que en 2022, cuando esta cifra se quedó en los 45.052, lo que supone un notable incremento del 33,4 por ciento.

Un notorio crecimiento de las infracciones sancionadas que, según la jefa provincial de Tráfico accidental, Inés López Alcaide, tiene detrás la intensificación de la vigilancia en las carreteras, que «no sólo ha llevado aparejado un crecimiento de las sanciones, sino también un descenso considerable de la siniestralidad en las vías de alta capacidad, las autovías, donde se ha pasado de lamentar 12 víctimas mortales en 2021 a un único fallecido en 2023».

Inés López, jefa provincial de Tráfico accidental en Cuenca. - Foto: Miguel A. Ramón

A su juicio, el carácter disuasorio de los radares y de los controles de velocidad de la Guardia Civil ha venido a contribuir a una mayor seguridad vial, que es, al fin y al cabo, el objetivo principal de la vigilancia.

«No es sólo que vayamos seguros en la carretera, sino también evitar todas las consecuencias de un accidente, desde el número de fallecidos hasta el resto de víctimas, sin olvidar, por supuesto, los efectos en su entorno familiar y en la sociedad, que también pierde valor», afirma.

Detalles. La mayoría de las infracciones de tráfico sancionadas fueron de carácter grave, 64.480 (95,3%), mientras que las muy graves se elevaron a las 1.762 (2,6%) y las leves a 217 (0,3%).

El exceso de velocidad supone el motivo de casi ocho de cada diez multas en Cuenca durante 2023. - Foto: Elaboración propia

Siete de cada diez multas, casi 51.000 (75,3%), fueron incoadas por medios de captación electrónica, como radares, drones o el helicóptero Pegasus; algo más de 11.000, el 17%, por agentes de la Agrupación Provincial de Tráfico de la Guardia Civil; 461 (0,7%) por  la Policía Local; y las ocho restantes, por la propia Jefatura Provincial de Tráfico.

El exceso de velocidad continúa siendo la infracción estrella en la provincia, que, por cierto, han vuelto a incrementarse, esta vez en un 12%, alcanzando los 51.975 expedientes sancionadores, el 76,8% del total. 

Le siguen, muy de lejos, las multas por circular con la Inspección Técnica del Vehículo (ITV) caducada, con 5.071, que se han reducido en un 4,5%; las relativas a no respetar la señalización del Stop, con 4.850; las relacionadas con el seguro del vehículo, con 1.185, un 1,8% menos que en 2022; y la no utilización del cinturón de seguridad, con 928, que han caído en un año un 35,2 por ciento, 516 menos.

Las sanciones por la presencia de drogas en la conducción han sido, sin duda, las que más han crecido en este 2023. Y es que han aumentado hasta las 839, un 202,9% más que en 2022, cuando se redujeron a 277. Nada que ver con lo experimentado por los expedientes sancionadores por tasa positiva de alcohol, puesto que la provincia cerró el pasado ejercicio con un 25,2% menos de multas, al pasar de las 801 del 2022 a las actuales 604. 

Los turismos aglutinan el grueso de las sanciones de tráfico. De hecho, protagonizan ocho de cada diez (83,3%), con 56.356. Los tractocamiones le siguen en número de multas, pero, eso sí, con muchas menos, 3.180, que representan el 4,7%, y, a continuación, se sitúan los vehículos mixtos adaptables, con 2.249 expedientes sancionadores (3.3%); las furgonetas, con 2.222 (3,3%);los camiones, con 1.334 (2%);y motocicletas, con 244, entre otros vehículos. 

Las autovías de la provincia  se convierten en el escenario de más de la mitad de las infracciones, 36.119 (53,4), si bien, tal y como apunta López, también son las que mayor flujo circulatorio soportan. Las carreteras secundarias registraron 19.776 (29,2%), las vías urbanas 6.464 (9,6%) y las autopistas 5.285 (7,8%).

Multas que conllevaron la detracción de un total de 43.658 puntos en el carné y la pérdida total de vigencia de 94 permisos de conducir.