Los conquenses tendrán que esperar un poco más de lo previsto para disfrutar del paso peatonal bajo el Puente de la Trinidad de la capital. Para ser más exactos, en torno a un mes y medio, tal y como confirma a La Tribuna el concejal de Urbanismo, Mantenimiento Urbano y Movilidad, Adrián Martínez.
En consecuencia, esta intervención urbanística, que arrancó a mediados del pasado mes de octubre, no se finalizará a mitad de marzo, como estaba previsto, a tenor de los cinco meses de plazo de ejecución fijados en el contrato de adjudicación, sino que se prolongará hasta finales de abril o principios de mayo.
Y es que, en palabras de Martínez, la empresa ha tenido que hacer frente a una serie de imprevistos, que le han obligado a proponer un modificado del proyecto y solicitar dicha prórroga temporal.
Imagen actual de los trabajos en la zona de la desembocadura del Huécar. - Foto: Miguel A. RamónImprevistos que han estado relacionados con el material de relleno existente en la zona de actuación y los mayores trabajos de excavación arqueológica acometidos para conocer mejor la evolución de este puente del siglo XVI, ampliado posteriormente en los siglos XIX y XX y catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC) con categoría de monumento.
Para el concejal, «el que se retrase una obra tan importante como ésta para ejecutarla bien, tampoco es problema, puesto que estamos hablando de una actuación muy demandada por los ciudadanos, lo que hace que estemos satisfechos por poder ejecutarla».
Y es que, tal y como recuerda, «no se puede olvidar que es una obra que va a resolver el problema de accesibilidad en el entorno del Puente de la Trinidad y va a generar una zona paseable muy amplia, desde la Fuente del Portland hasta el mismo Recreo Peral, sin necesidad de dejar la ribera del río; todo ello, sin dejar a un lado que era un compromiso electoral con la ciudadanía».
Las obras se centran en la actualidad en la urbanización de ambos márgenes del paso peatonal bajo el puente. - Foto: Reyes MartínezMuy avanzadas. Pese a estas circunstancias, Martínez subraya el buen ritmo al que se están desarrollando los trabajos, lo que está permitiendo que, en la actualidad, ya se haya alcanzado en torno al 75% de su ejecución de la obra.
De hecho, explica que ya se ha acometido la parte más complicada de esta intervención, como era la apertura del ojo cegado del Puente de la Trinidad y las excavaciones arqueológicas correspondientes, y desde este lunes ya se está trabajando en la urbanización de las dos márgenes del puente.
Así, en la parte de la desembocadura, ya han estado tratando la plataforma del caminito de tierra que va a conectar con el puente de madera. Mientras, en la zona del Parque del Huécar, se está acometiendo una rampa y una plataforma única con adoquinado y zona verde, que va a permitir controlar mejor las aguas pluviales y contar con una zona sin tránsito de vehículos, salvo el de los residentes. Trabajos, por cierto, que tienen una planificación de un mes de duración.
A partir de ahí, resta la parte más estética de la obra, con los elementos de seguridad, el revestimiento de acero corten del interior del túnel y las ventanas arqueológicas.