Los bares y restaurantes de la capital conquense se preparan para afrontar unos días muy especiales, con la llegada de la Feria y Fiestas de San Julián, que convierten a la capital en punto de encuentro no sólo para los conquenses, sino también para numerosos visitantes que no dudan en acudir estos días con ganas de disfrutar tanto del ferial como de los distintos eventos programados, como la feria taurina, las pruebas deportivas, los conciertos en La Fuensanta o el concurso hípico, entre otros muchos.
Unos días en los que estos establecimientos experimentan un incremento importante de su actividad y, por lo tanto, de su volumen de negocio, lo que hace que los tengan marcados en rojo en el calendario.
El optimismo reina en el sector hostelero conquense y a priori tienen puestas muchas esperanzas en que estas fiestas vuelvan a atraer a mucha gente a sus negocios, si bien tienen claro que no será una situación que se vaya a extender a los once días de fiestas patronales, sino más bien a una semana, más o menos, en especial coincidiendo con la 'Champion del toreo'.
Precisamente, desde la Agrupación Provincial de Hostelería y Turismo, su presidente, José Manuel Abascal, asegura que «lo lógico sería que los días de las fiestas de San Julián sean buenos para bares y restaurantes, como viene siendo habitual, ya que la gente siempre sale en estas fechas a disfrutar de los festejos».
Es por ello que considera que «la hostelería vivirá un buen momento», aunque precisa que «no será todos los días, más bien aquellos que coincidan con la feria taurina, que este año, además, ha crecido y se prolongará durante una semana».
Y es que, a su juicio, en estos siete días de toros, a los muchos visitantes que vienen a la ciudad en estas fechas a vivir la feria taurina, se suman los propios conquenses, que también salen, de ahí que todo indique que vaya a ser una buena semana de trabajo para estos establecimientos; eso sí, para unos más que otros, porque «siempre hay locales más de moda, que se llevan la mejor parte, aunque eso no quita que el resto también vayan a trabajar bien».
Pese al optimismo inicial, el presidente de los hosteleros deja un espacio para la cautela y señala que «no dejan de ser previsiones y buenas sensaciones, que esperamos, eso sí, que al final de las fiestas se confirmen y sean un revulsivo para el sector».
Hosteleros. En términos similares se han pronunciado los distintos restauradores de la capital consultados por esta redacción, como es el caso de Nacho Villanueva, propietario y chef del restaurante Recreo Peral, quien no duda en hablar de «buenas e, incluso, muy buenas perspectivas» de cara a la Feria y Fiestas de San Julián, como viene ocurriendo tradicionalmente.
Pero, eso sí, para Villanueva, ese incremento del volumen de negocio de la hostelería se concentrará en la primera parte de las fiestas, coincidiendo con los festejos taurinos.
No en vano, considera que «la feria taurina suele suponer entre el 75 y el 80 por ciento de la facturación en estos días festivos». Y, en este caso, a su juicio, con más motivo, «si se tiene en cuenta que el empresario Maximino Pérez no sólo ha mantenido el buen nivel de los primeros espadas, sino que, además, ha añadido un festejo mayor, lo que hará, en todo caso, será sumar facturación».
El resto de grandes momentos de las fiestas, como es el caso del Concurso Hípico, el ferial o los conciertos de La Fuensanta, piensa que no tienen especial repercusión en la hostelería de la ciudad, en unos casos por ser eventos muy conquenses y en otros por el horario en el que se desarrollan, que «no dan mucho margen de tiempo para ir a comer».
El propietario del restaurante La Venta, Manuel Moya, comparte la idea de que van a ser unas buenas ferias para el sector, sobre todo, durante la feria taurina, que «es lo que realmente engancha y atrae más gente a bares y restaurantes;y más aún este año con más festejos y grandes figuras del toreo».
Idéntica opinión tiene el propietario y chef del restaurante Raff San Pedro, Miguel Escutia, quien pone el acento en el hecho de que sean más días de feria taurina y se haya optado por repartir las grandes figuras en los distintos festejos para que todos los días haya buenas corridas, lo que «va a permitir que haya más gente durante más días». De ahí que espere que vayan a ser «unas buenas fiestas», que en la segunda parte «se complementarán con el turismo».