Una primavera de película

J.L.E.
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El Cineclub Chaplin arranca la programación de primavera, en la que incluye un homenaje póstumo al cineasta Carlos Saura con una exposición, un libro y la proyección de dos filmes

Geraldine Chaplin y José Luis López, en una escena de ‘Peppermint Frappé’ - Foto: Filmoteca de Galicia

El cineasta Carlos Saura, una de las figuras indiscutibles del cine español, recibirá en abril un homenaje póstumo por parte del Cineclub Chaplin. Este homenaje se engloba dentro de la programación de primavera, que arrancó ayer y que mostrará el crédito de 'Fin' el día 25 de junio. 

«Es un homenaje muy merecido porque Carlos Saura venía con frecuencia Cuenca», explica José Luis Muñoz, presidente del Cineclub Chaplin. El reconocido director oscense era un creador polifacético porque también abrazó otras disciplinas artísticas. Una de ellas fue la fotografía, una actividad de la que dejó un gran legado de imágenes. «Cuando era joven, llegó a Cuenca como fotógrafo y se recorrió la ciudad, los campos... todo», subraya Muñoz, quien recuerda que «la conocía perfectamente porque tenía aquí a su hermano, Antonio Saura». 

El responsable del cineclub conquense califica de «necesario» este homenaje póstumo, porque «sobre Cuenca se han hecho muy pocas películas importantes». De hecho, el nombre de Carlos Saura se une al de Juan Antonio Bardem, director de Calle Mayor, y que recibió un cálido reconocimiento hace años.

El homenaje tendrá lugar el día 25 de abril y constará de tres actos. Por un lado, en el Centro Cultural Aguirre se inaugurará una exposición sobre la vida y obra de Saura. También está prevista la presentación del libro Cuenca en la geografía narrativa de Carlos Saura. Además, se proyectarán dos de las películas de su filmografía relacionadas con Cuenca. Una será el documental Cuenca, que Saura dirigió en 1958. «Fue un impacto en aquel momento porque rompía el esquema de los documentales que hasta entonces se habían hecho en España», incide Muñoz. Como es lógico, también se proyectará Peppermint Frappé, «que es la gran película que hizo Saura sobre Cuenca».

Además de este homenaje, el señero cineclub conquense contempla la proyección de una decena de títulos. El programa de primavera comenzó ayer con la proyección de Misericordia, película francesa dirigida por Alain Guiraudie, ganadora de la Espiga de Oro en Valladolid. Precisamente, la primera de las tres sesiones de ayer contó con la colaboración de la Asociación de Profesores de Francés, que celebra la Semana Francófona. 

En las próximas semanas seguirán títulos como Aún estoy aquí, de Walter Salles; Grand Tour, de Miguel Gomes: A real pain, de Jesse Eisenberg; o Carretera perdida, del legendario David Lynch, recientemente fallecido.

José Luis Muñoz, que preside el cineclub desde 1986, en una segunda etapa, subraya la gran respuesta del público y la importancia de la proyección de las películas en versión original. «Hay una enorme diferencia en la calidad de entendimiento, eso ocurre cuando ves a los actores de verdad, los oyes en su idioma y escuchas los matices».