El país del sol naciente se ergió ayer con la ciudad de las dos hoces con un espectáculo de cultura japonesa en el que el resonar de los tambores embriagó de sentimiento nipón la ciudad de Cuenca.
Los percusionistas del grupo Seiwa Taiko sonaron, de una forma magistral, acompañando cada una de sus actuaciones de una pequeña explicación en la que además del significado de cada melodía hacían participes a los conquenses del espíritu ascentral de cada melodía. Una actuación entrañable en la que cada uno de los componentes de este grupo hizo sonar la percusión de una forma majestuosa, animando a todos aquellos vecinos y visitantes a involucrarse con la actividad
Uno de los turistas que disfrutaba de la ciudad, Thomas de nacionalidad francesa relató su estupefacción ante tal demostración de arte japonés. «No me esperaba que hubiese una actuación de este tipo en Cuenca, y me ha gustado mucho», relataba el parisino.
Los niños fueron algunos de los que más beneficiados salieron de esta cita con la música del país nipón. Participaron activamente dando palmas y saltando sobre el suelo de la Plaza Mayor para que todos vibraran al son del gong.
Esta actividad, que comenzó a las doce y media de la mañana, estaba organizada por el Ayuntamiento de Cuenca, el grupo de Ciudades Patrimonio y la consejería de Turismo, que preside la concejala, Nieves Mohorte.
Además de esta interpretación de música tradicional japonesa, le precedió una actuación de arte marcial japonés.