El incremento de los fallecidos en accidente en las carreteras españolas lleva a la Dirección General de Tráfico (DGT) a adecuar la distribución de los 122 nuevos radares a las nuevas circunstancias de la siniestralidad. Además, la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil revisará la vigilancia que hacen en carretera, incrementándola en aquellas provincias con porcentajes de siniestralidad elevados en las vías de alta capacidad.

A la espera de conocer la ubicación de los nuevos radares, los conductores que circulan por la A-3, en sentido Valencia, tienen que tener en cuenta que en el kilómetro 157, a la altura de Castillo de Garcimuñoz, está el radar que más multas por exceso de velocidad pone en la provincia. Además, este radar tiene el honor de ser el que más multas pone por exceso de velocidad a los conductores. Solo en 2023, que es el dato más reciente de la DGT, tras la actualización de diciembre del año pasado, las denuncias suman 19.355. Es decir, 53 al día para los conductores que son cazados por exceder los límites de velocidad.

La DGT tiene desplegados en la provincia más de cuarenta radares, entre fijos y móviles, colocados en vías de mayor y menor afluencia de tráfico, según datos relativos al día 19 de abril de 2024.

Según los datos de la DGT, que a la espera de los del año pasado, corresponden a 2023, en las carreteras de la provincia se impusieron 73.588 denuncias, de las que 51.985, el 70,6% fueron por exceso de velocidad que captaron los radares. De ellas, 31.787 fueron por la intervención de radar fijo y el resto, 20.198, con radar móvil.

La provincia de Cuenca, según los datos de la Jefatura Provincial de Tráfico, cerró 2024 con 15 víctimas mortales en 14 siniestros, frente a las 19 personas que perdieron la vida en 18 accidentes en 2023. Esto supone una reducción interanual del 21 y 22%, respectivamente. Caídas a las que se suma la de los heridos de gravedad, que pasaron de 69 a los actuales 58. Además, 2024 se saldó con 204 accidentes con víctimas en 1.881 siniestros.